A finales de los 90 y comienzos de los 2000 estaban en auge las series juveniles de instituto. Aunque llegábamos un poco más tarde que Estados Unidos, que nos llevaban años de ventaja con 'Sensación de vivir' o 'Melrose Place', conseguimos hacer nuestro el género y crear series míticas de nuestra televisión. Ahí tenemos el claro ejemplo de 'Al salir de clase', la serie diaria de Telecinco que fue la gran cantera de actores de nuestro país. O 'Compañeros' que se convirtió, sin duda, en una de las series juveniles más importantes de la historia de nuestra televisión. Sobre todo por tener un mayor realismo que la serie de Telecinco, y con unos personajes mucho más cercanos.
La ficción de Antena 3 tuvo 9 temporadas y 121 episodios, y alcanzó grandes picos de audiencia entre los años 1998 y 2002. Su temporada seis llegó hasta los 5 millones de espectadores y una cuota de pantalla de más del 30%. Un auténtico éxito entre el público juvenil que convirtió a sus personajes en auténticas estrellas. Incluso con una película como 'No te fallaré', que tocaba temas muy adultos como las drogas, la prostitución e incluso dejaba a uno de sus protagonistas en silla de ruedas. Una serie que marcó a toda una generación. ¿Quién no se acuerda de Quimi (Antonio Hortelano), Valle (Eva Santolaria), César (Julián González), Luismi (Manuel Feijóo) o Lolo (Daniel Retuerta)?
'Compañeros' trataba temas tabú para la época como las drogas o el embarazo juvenil, pero desde la perspectiva de unos adolescentes que querían comerse el mundo. Y su contraste con los profesores era lo que le daba el extra necesario. Grandes intérpretes pasaron por los pasillos del Colegio Azcona: Miguel Rellán, Beatriz Carvajal, Francis Lorenzo... incluso Concha Velasco. Una ficción que revolucionó todo y que sirvió de base para otras que vendrían después, como 'Física o Química'. Pero si había una familia conocida por todos en la ficción, era la formada por Valle, sus padres Rocío y Luis, y su hermano Lolo, al que daba vida Daniel Retuerta. El joven actor nacido en Fuenlabrada llegó a la serie con nueve años, y era el líder de ese grupo de niños más pequeños.
Y, aunque ya había debutado en series como 'Menudo es mi padre', no fue hasta llegar 'Compañeros' cuando Retuerta pudo demostrar de lo que era capaz. Pese a tener un personaje pequeño al comienzo, según fue avanzando la serie fue ganando peso y desarrollando tramas propias, convirtiéndose en uno de los rostros más conocidos de la serie. "Fue la primera serie española que despertó un gran fanatismo (después de 'Verano azul'). Fue una locura. Hay familias en las que me conoce la madre, la hija y la abuela gracias a la serie", confesó en ¡Hola!. "Lo que recuerdo es que 'Compañeros', además de mostrar la realidad que sucedía, también tenía una moraleja. No como en las series teenager de ahora, que solo tratan de reflejar la parte glamourosa, sexual y fiestera de la vida adolescente".
Tras 121 episodios, la ficción llegó a su fin, y pese a que se intentó continuar con una nueva generación de personajes, no consiguió calar entre el público. Retuerta dio el salto al cine con la película 'El viaje de Carol', de Imanol Uribe, y junto a Clara Lago. Además, siguió participando en diferentes series, aunque de manera más episódica, como en 'Hospital Central' o 'Ana y los siete'. Consiguió un papel más recurrente en 'Amar en tiempos revueltos', pero lo que volvió a traerle a primera plana fue su personaje de Roque en 'El Internado'. La serie de Antena 3, que contaba con Yon González, Martiño Rivas o Ana de Armas fue una ficción arriesgada, diferente, y que lideró audiencias gracias a su mezcla de serie juvenil y de misterio.
Daniel Retuerta dio vida a uno de los personajes principales que, casi al final de la serie, se reveló como el villano. Un auténtico traidor que dejó al público totalmente impactado. Se le dio tan bien interpretar a Roque que, aún a día de hoy, sigue recibiendo insultos. Porque ya sabemos que hay mucha gente que no es capaz de distinguir realidad de ficción. O simplemente son tontos. Que se lo digan a Jack Gleeson, el Joffrey Baratheon de 'Juego de tronos'. "Tú, enano de mierda. Están haciendo un nuevo Internado. Espero que aquí no se carguen a gente como tú lo has hecho. Desgraciao", compartió el actor en sus redes cuando se estrenó 'El Internado: Las Cumbres'.
"Si es una persona que confunde realidad con ficción... Hay que asumir que ha visto la serie. Entonces, ¿qué cojones haces hablándole a un muerto?", se defendió el actor en sus redes. "Te toca matar a alguien en la serie y lo que me pasa a mí en la vida es que la gente interactuaba conmigo como si fuera un reality", explicó en el podcast Animales Fantásticos. "Me escribían a mí porque estaban quemados con algo que hacía mi personaje. Date cuenta del proceso que tiene que hacer alguien para envenenarte tanto con una serie y buscar al actor en Instagram e insultarle".
'El Internado' le trajo muchas cosas buenas, y sigue manteniendo el contacto con actores de la serie como Yon González o Fernando Tielve. Pero a parte del hate de muchos fans de la ficción de Antena 3, el rodaje también le generó un complejo de inferioridad que le llevó a terapia. "Mi puñetera serie estaba en todas las revistas todas las semanas, pero éramos cinco protagonistas y salían cuatro personas en las fotos", contó en el canal de Youtube Nostálgicos Retro. "Y tú te tienes que preguntar por qué tú no. Y habrá gente que con sus huevazos te dirá que tú eras menos protagonista, y tú dices que dos de ellos sí, que los cuatro no. Y después tampoco, porque después yo sí tenía trama propia".
Pero, tras el final de 'El Internado', Daniel Retuerta no volvió a tener un personaje tan conocido. Tuvo algunas apariciones en 'Centro Médico' y 'Servir y Proteger', las series diarias de Televisión Española. Y su última ficción televisiva ha sido en la serie 'Parot'. Pero también ha seguido trabajando en cine, con películas como 'Soy una buena persona', o en teatro, donde se ha especializado en los últimos años. De hecho, se ha convertido en su refugio, como dijo en una entrevista para Lunas Pasajeras hablando sobre uno de sus últimos proyectos, 'Una noche en el Alhelí', que representó en el madrileño Teatro Alfil. "¿Un sueño por cumplir? Ojalá poder vivir del teatro y que se estrene algo escrito por mí en gran formato".
Actualmente, se dedica al mundo del streaming en Twitch, y además es jurado de batallas freestyle. Aunque en Twitter se sigue definiendo como "juguete roto", también defendió ahí su presencia en el teatro actualmente. "Un sitio-refugio. Donde sentirte vivo o en paz. Donde no importa que no te gustes o lo que pienses de ti mismo. Porque ahí te olvidas, estás tranquilo. Intocable. Un sitio que, si te lo manchan o lo corrompen, te matan".
Sigue toda la información de El Televisero desde Facebook, X o Instagram