La exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena fue entrevistada por Risto Mejide en 'Conversaciones en Fase Zero', el nuevo programa de Cuatro.
Este miércoles 6 de mayo, Risto Mejide estrenó en Cuatro su nuevo programa: 'Conversaciones en Fase Zero'. Un nuevo espacio de entrevistas a numerosas caras conocidas. María Teresa Campos, Andrés Iniesta y Manuel Carmena fueron algunos de sus entrevistados.
La exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, empezó confesando a Risto que resulta curiosos que uno de los efectos del confinamiento fuera que "la escena pública se ha vuelto doméstica". Ya que, estamos viendo a gente que solo conocíamos en el ámbito profesional, hablando de sus hijos, en casa…
Si algo ha sacado Carmena positivo de toda esta crisis sanitaria es la "sensación extraña, nueva y bonita de no tener prisa". Por lo menos en su caso, ya que admite que ella "siempre ha ido con prisa y ahora me siento bien".
Respecto al futuro, la exalcaldesa lo tiene claro: "Esto nos va a unir más, cuando la gente se une porque algo malo nos pasa se refuerzan los conductos personales, como si abriéramos nuestras manos de solidaridad, estamos más receptivos. De esto salen muchos afectos y vinculaciones interesantes".
Aunque confeso no tener miedo: "Pienso que no me va a pasar a mí. Debe ser esa necesidad que tenemos todos de protegernos. Creo que no hay cosa mejor para erradicar el miedo que hacer otras cosas: creativas, en beneficio de los demás. No centrarte en pensar en ti".
Elogia la gestión de Pedro Sánchez y de Martínez- Almeida
Sobre la gestión que está llevando a cabo el gobierno de Pedro Sánchez del coronavirus, Carmena cree que "Pedro Sánchez lo está haciendo lo mejor que puede. Me parece que lo está haciendo bien, no se deja arrastrar por la marea del lenguaje político, está intentando sacar lo mejor de sí".
También ensalzó la gestión de José Luis Martínez- Almeida: "El alcalde de Madrid en algún momento también ha asumido ese papel de buen capitán, y el Presidente se ha identificado con lo que pide la gente".
Mucho más dura fue con la oposición. "Es como si en política no se pudiera hablar. Eso no es política, es un circo, lleno de ira, de mentiras. Decir a alguien que no está haciendo las cosas bien es necesario, y más para salir de la tormenta, pero no decir las enormes barbaridades que está diciendo ahora la oposición. Son cosas absurdas. Sería importante poder hablar, pero parece que en política no se puede hablar, solo hacer discurso".
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