Cristina Pardo deja este recado nada más empezar ‘Liarla Pardo’ a estos cargos públicos: «Avispados»

Cristina Pardo comenzó ‘Liarla Pardo’ este domingo criticando a los obispos que se vacunaron antes de tiempo.

La cuestión de las vacunas está sacando a la luz avergonzantes casos de altos cargos que deciden vacunarse saltándose la línea marcada por el Gobierno. En este caso, numerosos son los casos de obispos que han aprovechado para inyectarse una dosis de Pfizer, una situación que Cristina Pardo ha criticado desde ‘Liarla Pardo‘ haciendo uso de una fina ironía. 

Nada más comenzar el programa de laSexta de este domingo 14 de febrero, en el hueco que ocupa su habitual editorial, la presentadora reflexionó sobre el día de los enamorados. Sin embargo, le añadió el matiz de la actualidad elaborando un zasca que ha sido de lo más aplaudido. 

«Ojalá todas nuestras parejas nos mirasen como un obispo a una vacuna»

«Hoy es el día de los enamorados. Ojalá nos miraran a todos con tanto entusiasmo como un obispo mira a una vacuna. Eso sería señal de que tenemos a nuestras parejas entregadas a la causa», fueron las palabras de la presentadora.

Tras esta introducción al programa dominical, las redes comenzaron a alabar a la presentadora por sus palabras, lo que avivó el fuego e hizo que volviese a la carga. Acto seguido, criticó a los obispos que se vacunan haciendo uso de sus privilegios. En este caso, les calificó de «avispados».

Sin embargo, no ha sido solo la propia conductora del espacio la que ha criticado esta actitud. El programa contó con uno de los sacerdotes más mediáticos gracias a la fama adquirida en redes sociales. El joven criticaba la actitud asegurando: «Nos ponen a todos en juego».

Los casos que indignaron a Cristina Pardo

En concreto, los casos que generaron la indignación de la conductora del espacio fue el de Jesús Murgui, obispo de Orihuela-Alicante. De este alto cargo ha trascendido que se vacunó el pasado día 8 de enero aprovechando los inyectables de la residencia de la Casa Sacerdotal alicantina.

Lo mismo sucede con el obispo de Mallorca, Sebastia Taltavull. En este caso, el alto cargo eclesiástico se vacunó en una residencia sacerdotal; hecho por el que tuvo que disculparse públicamente.