‘Entrevías’ pierde a este personaje y suma otra desgracia esta semana en Telecinco

El segundo capítulo de ‘Entrevías‘ acabó en tragedia de la misma forma que lo hizo el estreno de la tercera temporada con la muerte por sorpresa de Nata. En la entrega de la pasada semana Ezequiel (Luis Zahera) cerró la noche disparando mortalmente al subinspector Linares, mano derecha del comisario Romero (Óscar Higares).

El policía tendió una trampa a Ezequiel por orden de Romero tras ser admitido en su puesto en la comisaría del barrio. El agente le introdujo fardos de droga en el maletero de su coche para, más tarde, en un control, pillarle con el material. En mitad de la operación, Ezequiel le disparó a bocajarro en la cabeza y se dio a la fuga.

Esta pérdida será el punto de partida del episodio 3 de ‘Entrevías’ y revolucionará al cuerpo policial, trayendo más conflicto a un barrió que ya de por sí es un polvorín. En paralelo, y tras matar al subinspector, las cosas se van a poner muy, pero que muy feas para Ezequiel y en el siguiente avance te adelantamos lo que va a pasar este martes, 24 de octubre.

Avance del capítulo 3 de ‘Entrevías 3’ de este martes, 24 de octubre

Desesperado y sin muchas alternativas para salir airoso del entuerto, Ezequiel decidirá entregarse, pero su ahijada Dulce le quita la idea de la cabeza. Aunque no tiene pruebas para demostrarlo, Romero sabe que es el responsable de la muerte de su subalterno y hará lo que sea para demostrarlo y llevarle a la cárcel. Sin embargo, Ezequiel no se lo pondrá nada fácil con sus artimañas.

Por otro lado, sabiendo que corre peligro de muerte en el barrio, Tirso está a punto de marcharse de ‘Entrevías’ y viajar a Cádiz para quitarse un tiempo de en medio mientras se aplacan las bandas que quieren vengar el crimen de Nata, pero un acontecimiento truncará su viaje: un ataque con cóctel molotov contra la ferretería con graves consecuencias para su hijo Santi.

Así, el ferretero se da cuenta de que la amenaza no va dirigida solo contra, él sino contra todo su entorno, por lo que cambia de opinión y decide quedarse para intentar acabar con las bandas para siempre con la ayuda de sus amigos del bar. Pero el plan que trazan será peligroso. Mientras todo esto sucede, Irene y el bebé reciben el alta médica y se instalan en casa. Maica se presentará con la idea de conocer a su bisnieto, pero Irene se resiste a considerarla parte de la familia.