'GH VIP' ha recuperado una de sus dinámicas más reconocidas. Se trata de la 'La curva de la vida' en la que cada concursante plasma en una pizarra su recorrido vital haciendo especial hincapié en sus mejores y peores momentos. Karina ha sido la concursante escogida por la organización para estrenar la dinámica durante la octava edición.
La cantante se ha entregado al máximo al rememorar algunos de sus momentos más agrios como el momento en el que le sobrevino la fama. "Es muy difícil gestionar una carrera artística tan joven", ha reconocido. Sin embargo, uno de los episodios más duros a los que ha tenido que hacer frente fue a la muerte de su padre y su divorcio. "Estos años fueron muy tristes y amargos, me separo de mi marido y muere mi padre", ha comentado.
A pesar de ello, el instante en el que Karina se ha mostrado totalmente rota ha tenido que ver con su hija. En un primer momento, la concursante se ha visto sorprendida con la intervención de su hija, quien le ha animado en todo momento. "Eres muy graciosa, eres muy buena, muy bonita. Voy como un palomo del orgullo que tengo de mi madre y nada más que le pido a Dios todos los días mamá que me parezca a ti un poquito", le ha transmitido Azahara, su hija, a una emocionadísima Karina.
Tras este emotivo mensaje, Karina se ha roto por completo. No ha sido el único momento sensible para ella. Otro de los instantes más duros se ha vivido cuando la concursante ha desvelado la problemática de su nieta. Precisamente, dicha enfermedad ha provocado que Karina desvele el motivo de peso que le ha llevado a participar: "Yo le pido a Dios todas las noches que se ponga buena y por ese motivo también estoy aquí, para que pueda mi hija a buscar, bueno hay buenos médicos, pero si hay alguien mejor... para la chiquita".
Sigue toda la información de El Televisero desde Facebook, X o Instagram