Ana Rosa Quintana, en boca de todos por cómo ha arrancado su programa tras las elecciones

Era muy esperado el editorial de Ana Rosa Quintana tras los fríos resultados electorales para el PP pese a su victoria. Feijóo gana las elecciones, sí, pero muy lejos de la euforia pronosticada, pues tiene casi imposible la gobernabilidad del país. Y lo cierto es que la comunicadora del programa matinal de Telecinco ha sido fiel a su estilo, generando controversia una vez más con sus palabras. Palabras que han denotado cierto reventamiento o pesadumbre. No hay que olvidar que, el viernes, la periodista se atrevió con una porra y auguró 155 escaños al PP.

«Enhorabuena a Feijóo, ganador de las elecciones generales, y enhorabuena a Pedro Sánchez, perdedor de las elecciones generales», ha empezado Ana Rosa con su afilada ironía. «El PP ha ganado las elecciones con 136 escaños y una subida de 47 diputados, pero se da una paradoja inédita. Por primera vez en democracia, podría gobernar el partido perdedor, el PSOE, con 122 escaños. Eso sí, si consigue los apoyos suficientes para la investidura de Sánchez. La pregunta es: ¿cuál va a ser el precio?», ha planteado.

A continuación, Ana Rosa Quintana se ha permitido despreciar el júbilo en Ferraz ante la sede del partido socialista: «Nunca en la historia democrática un perdedor de las elecciones había salido al balcón de la sede de su partido a celebrar una derrota como hizo Pedro Sánchez, jaleado por sus ministras». «A Feijóo no le dan los números y a Sánchez sí le saldrían las cuentas si vuelve a reeditar el gobierno Frankenstein. Eso sí, apoyado con los 31 escaños de Sumar, los independentistas y además, ahora, con los de Puigdemont», ha comentado con su habitual tono displicente.

Al hilo, Ana Rosa ha repasado los obstáculos que se le avecinan al PSOE de Pedro Sánchez si quiere revalidar el Gobierno. «Gabriel Rufián (Esquerra Republicana) ya avisó: el precio esta vez iba a ser más caro. ¿Hablamos de referéndum, de amnistía, de financiación? El PNV también subirá el precio y más ahora que Bildu le ha dado el sorpasso por un escaño. Ortuzar (su portavoz) avisó: nos hemos sentido usados por el PSOE como un kleenex y eso no volverá a pasar. Y Otegi también avisó: pacta con el PSOE cuestiones de estado».

Por supuesto, Ana Rosa Quintana apenas ha tardado unos minutos en azuzar el fantasma de Puigdemont: «Junts también ha avisado: el PSOE tiene muchas deudas con Cataluña y es momento de pagar. ¿Quién tiene precisamente la llave de la gobernabilidad en España? Pues el amo de llaves es Carles Puigdemont, quien puede abrir la cerradura del gobierno de España desde Waterloo. Si se abstiene y el resto de los socios vuelven a apoyar al PSOE, volveremos al día de la matraca multiplicada por siete: los escaños de la antigua CIU».

«Quedan más incógnitas por resolver. Feijóo ya ha dicho que va a intentar formar gobierno. ¿Pero cuándo propondrá el Rey al candidato a la investidura para que el reloj comience a marcar los tiempos? Si fracasa Feijóo, el Rey tendrá que proponer luego a Sánchez o se repetirán las elecciones e iremos a votar en unos meses. Yolanda Díaz, que ayer quedó cuarta, dijo que habían ganado y que, por tanto, la democracia había ganado. Estamos ante un término de nuevo acuño: la derrota victoriosa. Porque la victoria tiene muchos padres y la derrota, hasta ahora, era huérfana», ha proseguido Ana Rosa Quintana con notable desaire.

Por último, la presentadora de Mediaset ha lanzado un órdago a las dos fuerzas más votadas: «PP y PSOE han sumado nada menos que 258 escaños. Millones de españoles han elegido entre estos dos partidos. ¿Tan difícil es ponerse de acuerdo entre ellos para las cuestiones básicas de la gobernabilidad del Estado español? ¿Tan solo es posible una coalición con las minorías? ¿Qué ocurre con el resto de millones de españoles excluidos? Ya no se trata de que gobierne la lista más votada, se trata de que la mayoría de los españoles se sientan representados por sus partidos políticos. Se trata de que los españoles no vivamos divididos en bloques«. En ese sentido, Ana Rosa Quintana ha rematado con una sorprendente petición: «Somos una democracia parlamentaria, pactemos en el Parlamento sin vetos entre estos dos grandes partidos. Sin bloques y sin bloqueo. Y sobre todo, sin facturas y sin fracturas. Eso sí, soñar es gratis».