Rocío Carrasco, al límite del deshaucio por culpa de Fidel Albiac y su desorbitada deuda

Las ingentes deudas de Fidel Albiac con Hacienda hacen que tanto él como Rocío Carrasco puedan quedarse sin el chalet en el que actualmente residen.

Devastadora situación la que están atravesando en estos momentos Rocío Carrasco y su marido Fidel Albiac. El matrimonio se encuentra en el punto de mira tras esa encarnizada guerra con Antonio David Flores, que se ha recrudecido en los últimos días en 'Sálvame' mientras el malagueño se hace fuerte en los platós de Telecinco.

La situación de su exmujer y del abogado es asfixiante económicamente hablando y todo esto es así por las deudas que Fidel mantiene con la Hacienda Pública. Debe al fisco 150.000 euros en concepto de IRPF del año 2015, según adelanta la revista 'Lecturas'. Una cantidad que de momento no ha sufragado y no hay visos de ello.

Por eso, el organismo tiene en el ojo del huracán a la pareja, que podría ver embargados sus bienes y propiedades de una forma inminente. Entre ellas, el chalet en el que actualmente hacen vida. Pero que la situación económica no sea nada boyante y sí muy dramática entre Rocío Carrasco y Fidel Albiac no solo es por esa persecución de Hacienda.

También por la otra deuda que Rocío tiene en lo referente al Impuesto de Sucesión por la herencia de su madre Rocío Jurado. Debía haberlo abonado tras su fallecimiento en 207, pero 13 años después esa deuda se mantiene. Además, a nivel profesional, recibía dos duros varapalos.

Porque, por un lado, su proyecto teatral con el musical en memoria de su madre se ha visto completamente paralizado. Todo como consecuencia de la pandemia del coronavirus. Y además, ha perdido su trabajo en TVE como colaboradora de 'Lazos de Sangre', donde ha participado en varias entregas este verano.

Una situación absolutamente insostenible por la que ahora se entiende que agilice todos los trámites a fin de que Antonio David le pague los 80.000 euros por impago de pensión alimenticia. Y ahora se entiende esas demandas a diestro y siniestro que interpone para conseguir el dinero y así encontrar un respiro.