Ana Obregón sigue sin levantar cabeza tras la muerte de su hijo, como ha puesto de manifiesto con su última publicación en Instagram
El pasado 13 de mayo, todos nos quedábamos muy tocados al conocer el fallecimiento de Álex Lequio, el hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio, con tan solo 27 años y tras dos de dura lucha contra el cáncer.
Desde entonces, sus padres, y muy especialmente su madre, está desgarrada por el dolor. Y así lo pone de manifiesto con sus publicaciones en Instagram. Las pocas veces que se encuentra con fuerzas para escribir en la red social, lo hace con desgarradores mensajes y nostálgicas fotos junto a su hijo.
Y lo ha vuelto a hacer. Este miércoles 26 de agosto, la actriz de 'Ana y los siete' ha compartido con todos sus seguidores de Instagram una fotografía muy especial de hace tan solo un verano, un verano en el que eran felices. En la instantánea aparecen, en su casa de Mallorca, Ana junto a las tres personas que más quiere, sus padres y su hijo Álex.
El texto con el que acompaña la imagen, no puede ser más desgarrador. "Antes me hacía ilusión cuando mi móvil me recordaba 'tal día como hoy…'. Ahora llevo horas mirando esta foto entre lágrimas desde mi retiro, sentada al atardecer en el mismo sofá mirando al Mediterráneo".
Una fotografía de hace tan solo doce meses, en las que estaban felices, como ella misma dice: "mirando hacia un futuro maravilloso con las buenas noticias de salud de mi hijo". Y es que, por aquel entonces, el joven era todo energía tras haber pasado unos meses muy complicados por el tratamiento contra el cáncer.
"Sé que es una foto que jamás se repetirá y duele indescriptiblemente", escribe la actriz, rota de dolor tras perder a su único hijo, y como ella misma decía "al amor de su vida".
La importante reflexión de Ana Obregón
Pero, tal y como ha compartido en su mensaje de Instagram, hay algo en lo que Ana encuentra consuelo tras el durísimo golpe que ha recibido. "He decidido compartirla con vosotros para recordaros que como decía mi Aless: ‘Lo más importante de esta vida y lo único que al final de tus días te llevas son el tiempo y el amor que dedicas a las personas que quieres".
La actriz reconoce que, pese al dolor que siente, tiene un pequeño "alivio" cuando es consciente de que "nada ni nadie, ni siquiera su partida me van a quitar los infinitos momentos de amor que mi hijo que me regaló y su lección de vida. Y esto es lo único que alivia un poquito mi dolor por la eternidad de su ausencia y su dolor por no estar aquí".
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