'Cuatro al día' con Joaquín Prat se ponía en contacto con una famosa presentadora de televisión arruinada que ha tenido que recurrir a 'las colas del hambre' para comer.
Este martes por la tarde se vivía uno de los momentos más difíciles que le tocaba afrontar a Joaquín Prat en 'Cuatro al día' cuando intervenía en directo una conocidísima presentadora que se encuentra en la más absoluta indigencia. Tanto es así, que ha tenido que recurrir a las llamadas 'colas del hambre' para poder echarse algo de comida a la boca.
Su situación no puede ser más dramática desde hace varios años. No tiene nada de trabajo, está arruinada, perdió a su marido hace siete meses por el parkinson y vive de la caridad de una vecina que le ha cogido en el barrio madrileño de Tetuán. Con un colchón en pleno suelo para poder dormir.
Se presentó en el programa de Joaquín bajo el nombre ficticio de "María". No quiere que la audiencia conozca su identidad. De hecho, la entrevista la concedió de espaldas a la cámara. Así explicó también cómo era su vida en el pasado cuando estaba acomodada y cuando su carrera profesional era un éxito. "Uno puede haber tenido una vida cómoda, de clase media o media-alta, y verse en las llamadas colas del hambre", declaraba muy resignada.
En ese sentido, confesó que no solo se ha dedicado a la televisión. También ha liderado castings, ha sido modelo, mentora, habla cuatro idiomas, se considera culta y con un una preparación bastante buena. Además, ha denunciado en Cuatro la ignorancia que ha recibido por parte del Estado. Ni una sola ayuda: "No recibo ningún tipo de prestación por parte del Estado y me acabo de quedar viuda".
He sido compañera vuestra (ha trabajado en TV), he sido modelo, he tenido mi propia agencia de dirección de casting, he sido azafata, he sido intérprete, he sido mentora... y ahora me veo en esta situación. Como no he cotizado el mínimo de años que me piden me veo con una mano delante y otra detrás", ha comentado.
"Creo que es mucho mejor pedir que robar, como se suele decir. Gente como yo tiene que salir adelante como sea. Nos puede pasar a todos, nos puede afectar así la pandemia, porque efectivamente nadie puede saber cómo le afectará. Ahora me encuentro en esta circunstancia y tengo que acudir a los comedores sociales. No tengo hijos ni padres que me puedan ayudar", proseguía.
Para terminar, la amarga entrevista acabó con final feliz, pues varias personas llamaron a 'Cuatro al día' para ofrecerle trabajo. Entre ellas, una empresaria que entró en directo por teléfono en el programa de Prat. "Estaba escuchando el testimonio de esta mujer y me estaba revolviendo por dentro", dijo la señora ante una "María" que rompía a llorar.
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