Lo ocurrido a los 5 minutos de esta accidentada cita en ‘First Dates’ supera todo lo imaginado

Carlos Sobera ha sido testigo en la última entrega de ‘First Dates’ del momento más escatológico en el dating show de Cuatro, con lo vivido en una de sus citas.

Carlos Sobera ha sido testigo de situaciones de lo más inverosímiles durante ‘First Dates‘, pero lo visto en la entrega de este lunes 6 de febrero ha superado toda previsión. Beatriz y Pablo han sido dos de los protagonistas de la última entrega del dating show de Cuatro. Dos personas que no quieren tener una relación monógama. Mientras que él prefiere la poligamia, ella se define como una «anarquista emocional».

Beatriz se ha presentado en ‘First Dates’ confesando su particular concepto del amor: «Me relaciono como anarquista emocional, eso quiero decir que me muevo en las no monogamias éticas. Me vinculo con todo el mundo de forma individual e intento generar una relación en la que estemos cómodas con lo que tenemos».

Por su parte, Pablo ha adelantado que busca «una persona que tenga un planteamiento de amor libre y poligamia en las relaciones. Vengo a lo que suceda y ya está». Sin embargo, su presentación ha sido algo accidentada; al ver a Beatriz le ha dado la mano y Elsa ha tenido que intervenir. El soltero se ha apresurado a rectificar y le ha acabado dando un fuerte abrazo a su cita. Además, él se ha olvidado las gafas y ha visto a su cita «borrosa». Para Beatriz le ha parecido que él no era su tipo físicamente, pero le ha gustado la energía que transmitía.

«Me tiro muchos pedos»

Sin embargo, el momento más surrealista de la velada en ‘First Dates’ ha llegado a la hora de pedir el postre: cuando Pablo no se ha cortado en confesar que no podía tomar leche, y ha querido puntualizar las funestas consecuencias que le provocaba: «Me sienta mal, luego me tiro muchos pedos«. 

A Beatriz le ha parecido que ese escatológico comentario no era apropiado para los 5 primeros minutos de una primera cita: «Me ha parecido poco elegante que nada más sentarme diga que la lactosa le causa muchos pedos, pero también me ha hecho mucha gracia. Para mí, reírme es lo más de lo más», ha reconocido.

El resto de la cita ha transcurrido con muchas risas, pero Daniel no ha querido hablar mucho para no hacer reír a Beatriz mientras cenaba. De hecho mientras se reían se le ha escapado un eructo: «Y eso que no he tomado leche», dejaba entrever el joven sin pudor. «Soy muy guasón. Soy míster natural y no pongo filtro», se ha acabado definiendo él. Finalmente, ambos han sentido una conexión especial y se han dado otra oportunidad diciendo sí a una segunda cita.