El indignado alegato de Ana Rosa contra la decisión del Gobierno de cerrar Madrid: «¡Es ridículo!»

Ana Rosa Quintana ha mostrado su disconformidad en Telecinco con las lagunas que existen en la orden de cierre de Madrid.

El cierre de Madrid, que se producirá a partir de las 22:48 horas de este viernes, cuando entra en vigor la orden ministerial publicada en el Boletín Oficial del Estado, está generando bastante controversia. Todo por las lagunas que existen y la escasa definición por parte del Gobierno de la Comunidad de Madrid y de Sanidad. Por esta razón, Ana Rosa Quintana se ha mojado como nos tiene acostumbrados.

La presentadora de las mañanas de Telecinco estallaba en directo contra la confusión que existe en torno al cierre. Considera que dichas medidas no son claras y critica por qué no se ponen en marcha las mismas medidas y las mismas leyes que se aplican en el resto de Europa. “¡Es ridículo!”, ha dicho visiblemente enfadada.

Además, lo que no llega a comprender la comunicadora es por qué sí Madrid y otros nueve municipios, y no otras zonas del país que también se encuentran con altos niveles de incidencia de contagio a juzgar por los datos. “Si realmente la situación está mal en Madrid, está mal en muchos sitios…”, comentaba.

Al tiempo que afeaba los criterios que se siguen y el límite que las autoridades han puesto a la hora de establecer las restricciones. «Sigo sin entender por qué se pone el límite en 500 por 100.000 habitantes, si en Europa se están poniendo los límites en 250 por 100.000 habitantes», denunciaba en la mesa de debate.

«Es ridículo todo»

Precisamente esos umbrales establecidos por cada 100.000 habitantes, son los que han hecho que, a continuación, Ana Rosa haya hecho una petición contundente. “Hagamos ya por 250, hagámoslo de una vez, hagamos cosas que realmente sirvan”, instaba. Para asegurar que estas medidas van a permitir moverse normalmente “excepto salir para ir al pueblo o en el puente”.

Para concluir con su alegato, Quintana hacía un guiño a uno de los sectores más perjudicados por estas nuevas restricciones en Madrid: el de la hostelería. También ha sido tajante en ese sentido: “La gente no se contagia en los restaurantes, pero igual es más útil si le dicen a los propietarios que a las once tienen que cerrar, ¡pues a las once todo el mundo en su casa!”.

También ha concluido denunciando el vacío que tiene Madrid en el aeropuerto de Barajas. “Yo puedo ir a Bélgica, si me dejan entrar, el belga puede entrar y yo no puedo ir a Pozuelo… ¡es como ridículo todo!”, sentenciaba con ese calificativo.