La hija de Antonio David Flores y Rocio Carrasco, Rocío Flores, se desliga del resto de sus compañeros en 'Supervivientes 2020' y apuesta por otro tipo de recompensa que nada tiene que ver con saber algo de su familia.
Llevan seis semanas de concurso intenso y se nota que las fuerzas ya empiezan a flaquear entre los concursantes de 'Supervivientes 2020'. Por ello, ahora más que nunca son muy importantes los juegos de recompensa.
Normalmente es la comida la que más les motiva a todos para luchar y superar las pruebas del reality. Sin embargo, cuando se les pregunta por qué tipo de recompensa quieren son muchos los que optan por ver a algunos de sus seres más queridos.
Así, el grupo de los mortales se ha mojado sobre esta pregunta tal y como recoge la web de Telecinco. Por su lado, Barranco, el actual líder del equipo deja claro que lo que más quiere ahora es poder ver a su chica. Algo en lo que coincide con Jorge que pide poder encontrarse con su mujer en la isla. A ellos se suma también Ferre que tras la recompensa de esta semana pide pasar una noche con su "niña".
Otros que también prefieren poder hablar con los suyos antes que recibir algo de comida son José Antonio Avilés y Elena. El colaborador de 'Viva la vida' lo tiene claro: quiere hablar con su madre. Y la madre de Adara también escoge "hablar con los míos".
La única que se desliga del resto y se olvida de su familia a la hora de escoger recompensa es Rocío Flores. Después de pedir saber algo de su madre Rocío Carrasco hace unas semanas; ahora la hija de Antonio David Flores prefiere "un bocata de filete empanado de mi suegra, con queso y mayonesa".
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