La exconcursante de ‘Gran Hermano’ se ha mostrado destrozada y agotada por el procedimiento médico que tiene que atravesar asiduamente debido a su grave estado de salud provocado por la fibromialgia.
Si Maite Galdeano demostró a todo el mundo en la casa de Guadalix de la Sierra que a hiperactividad no le gana nadie, en la actualidad la pamplonica no está pasando por su mejor momento. Su propia hija, Sofía Suescun, ha compartido con sus seguidores el duro momento por el que está atravesando Maite.
La ganadora de ‘Supervivientes’ y de ‘Gran Hermano 16’ ha publicado unos stories en su cuenta de Instagram donde informaba a sus seguidores que su madre había sido ingresada de urgencia tras sufrir un nuevo brote de fibromialgia. Maite aparecía en pantalla muy desmejorada y bastante desanimada con el proceso médico que está viviendo.
Sofía Suescun ha estado en todo momento acompañando a su madre y ha querido mostrarle su apoyo a través de Instagram. "Lo que le están haciendo pasar a mi madre es inhumano", explicaba Sofía. Maite ha explicado en otro vídeo que “le habían sacado medio litro de sangre y que ya estaba harta tras sufrir un nuevo ingreso de urgencia”.
A pesar de la dura situación, Maite Galdeano ha querido mirar hacia el futuro y ha asegurado a sus seguidores que cuando finalice sus ingresos hospitalarios contará cómo ha sido todo el proceso por el que ha pasado. "Se va a enterar España de lo que me están haciendo sufrir", decía Maite.
A este mensaje de esperanza también se ha unido Sofía Suescun la cual ha querido dar fuerzas y ánimos a su madre. "Menos mal que eres la más fuerte del mundo. Puedes con esto y más", decía Suescun.
El duro momento de Maite
Desde que Maite empezara a tener sus primeros problemas de salud, su trayectoria televisiva se ha ido reduciendo poco a poco hasta tener que abandonar por consejo médico los platós. La exconcursante de ‘Gran Hermano’ desveló en una entrevista a la revista Lecturas hace ya varios meses que padecía fibromialgia.
“Me duelen tanto las muñecas que incluso cortar ajos y cebollas es una dificultad, no puedo cocinar. Me despierto por la mañana como si me hubiera pasado un camión por encima”, confesaba Maite. Pero lo que es más desgarrador aún, Maite desveló que también padecía una profunda depresión. “Me quise suicidar tirándome a las vías del tren. Mis perros me sacaron el cuerpo de las vías con el hocico”, narraba.
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