Emmy Russ había orquestado con la ayuda de varios compañeros su nominación en 'Secret Story' para abandonar la casa sin pagar la multa. Esto le puede costar la expulsión por parte de la audiencia
Emmy Russ no está pasando por su mejor momento en 'Secret Story'. La concursante, que está nominada esta semana, se enfrenta a una crisis en la casa con sus compañeros de los que se muestra cada vez más alejada. Tanto es así que ha amenazado en más de una ocasión con abandonar. En un momento determinado de la gala, Sobera alertó a los espectadores asegurando que Emmy, "lo está pasando tan mal que incluso se plantea abandonar".
Acto seguido, se ha podido ver como la concursante acudió al cubo para pedir su expulsión en el caso de que Canales fuese el expulsado por la audiencia. Ante esta inhóspita petición, la organización tuvo que recordarle que la decisión estaba en manos del público. "O la audiencia me expulsa o abandono, ¿verdad? Puedo aguantar un tiempo, pero quería probar un camino. Entonces yo no os aviso y suelto la bomba", comentaba en base a un hipotético abandono.
El origen de dicho amago de abandono se debe, tal y como ha expresado la protagonista, a su papel en la casa. La alemana se siente relegada y asegura no entender el número de salvaciones de Cristina o Luca. Precisamente para medirse con ellos, Emmy ha llevado a cabo la estrategia de pedir su abandono.
Un plan que no le ha sentado bien a sus compañeros. La alemana parece tenerlo claro e incluso ha llegado a comentárselo a algunos compañeros como Isabel Rábago que decidía reprenderla por su actitud. "No se puede abandonar un trabajo, no se debe", le recriminó Isabel Rábago. "Puedo y lo voy a hacer", le espetó.
Precisamente estos amagos de abandono han hecho brotar a algunos compañeros como Lucía Pariente que espetaba: "Parece que si todos no decimos que Emmy es maravillosa, somos lo peor. Alguien que pide una nominación parece que se está riendo de todos nosotros, de la audiencia y de todo". También Luis Rollán ha calificado la actitud de la joven como "egoista".
"Emmy ha vuelto a amenazar con irse y todo depende de la prueba de esta semana", anunciaba Sobera. El presentador ha recordado como durante la gala del lunes los concursantes se posicionaron y decidieron quién quería que fuese el siguiente expulsado. Unos posicionamientos que en palabras de Carlos Sobera, no estuvieron llenos de sinceridad, sino todo lo contrario.
De hecho, el presentador les ha dado la oportunidad de volverse a posicionar y han sido dos los concursantes que han cambiado su veredicto: Julen de la Guerra y Lucía Pariente. "Si se quería ir, aunque se quiera quedar ahora, debería de marcharse porque aquí hay gente que se quiere quedar", comentó esta última.
Sigue toda la información de El Televisero desde Facebook, X o Instagram