La sonada publicación de Silvia Intxaurrondo antes de votar crea un descomunal revuelo

Silvia Intxaurrondo se ha convertido en una de las grandes protagonistas de la última semana de campaña electoral tras su polémica entrevista a Alberto Núñez Feijóo en ‘La Hora de La 1’ de TVE. La presentadora desmontó las mentiras e inexactitudes que el líder del PP ha venido propagando con impunidad, y le dejó el total evidencia ante los espectadores.

Desde entonces, ha alcanzado un reinado absoluto en las redes sociales; siendo tendencia nacional durante varios días con una avalancha de aplausos por haberse atrevido a hacer lo que, por ejemplo, no hacen sus homólogas matinales o, sin ir más lejos, los moderadores de aquel esperpéntico cara a cara con Pedro Sánchez en Atresmedia.

Pues bien, cuando el asunto parecía que había amainado, Silvia Intxaurrondo se ha situado nuevamente en la picota con su muy significativa publicación en Twitter. La periodista vasca llevaba varios meses inactiva en esta red social. Desde abril no había compartido ni un solo post en su cuenta oficial.

Silvia Intxaurrondo: «¡Ya en la cola! Ganas de Votar»

Sin embargo, consciente de que está en la palestra y de que cualquier pronunciamiento por su parte va a provocar un gran revuelo, ha decidido difundir un selfie en el que aparece con las dos papeletas electorales, la del Congreso de los Diputados y la del Senado, y con el mensaje: «¡Ya en la cola! Ganas de Votar».

Como cabía esperar, la publicación en cuestión está arrollando sobremanera. La emitió a las 8:40 de la mañana, veinte minutos antes de la apertura de los colegios electorales; y, en apenas unas horas, ha roto el contador de ‘me gusta’ con casi 30 mil y subiendo. También ha acaparado miles y miles de compartidos y centenares de comentarios de todo tipo.

Entre ellos, están quienes tienen meridianamente claro que Silvia Intxaurrondo va a votar al PSOE; quienes dicen que votar a la izquierda es votarla a ella por lo bien que ha desempañado el periodismo cuando más se necesita; quienes piden contener a la derecha para que su puesto no peligre en RTVE; o quienes, por contra, arremeten contra la comunicadora y desean su cabeza si sale adelante un gobierno del PP. Afortunadamente, estos últimos son minoría.