El amargo motivo por el que Agoney ha desatado el llanto en 'Dúos Increíbles': "Me toca mucho"

Ana Belén y Agoney han interpretado 'Si tú no estás' de Rosana en 'Dúos Increíbles' de TVE, y el ex triunfito ha emocionado a todos con su historia detrás de la canción.

'Dúos Increíbles' ha vuelto a vivir un momento de lo más emocionante. El programa ha tenido el lujo de contar en su segunda gala con un dúo compuesto por Agoney, concursante de 'Operación Triunfo 2017' y Ana Belén. Ambos han cantado la canción de Rosana "Si tú no estás". Ha sido precisamente la canción escogida la que ha emocionado a Agoney y a la audiencia del concurso musical de TVE.

"Tiene mucho significado para Agoney", ha empezado explicando Ana Belén, que remarcaba la importancia de esta para el cantante. Era entonces cuando el artista daba unas pinceladas de qué es lo que hace especial la canción: "Todos desgraciadamente alguna vez hemos tenido que despedir a alguien, o nos tocará, porque la vida es así. Esta canción me toca mucho".

Además, Agoney agradecía a Ana Belén, su compañera en 'Dúos Increíbles' ser el gran apoyo que le ha sido durante la preparación de la canción. "Me ha ayudado mucho cantarla contigo, aguantar esa emoción. Yo no sabía si la íbamos a terminar", ha confesado Agoney: "Es una canción con la que me crié. Mi infancia la recuerdo con mucho cariño y siempre quiero volver a allí. Voy a evitar emocionarme, porque a mí este tema me lleva a un momento...".

Es precisamente la muerte de su madre hace solo cuatro años lo que hace que 'Si tú no estás' no es una canción cualquiera para Agoney. Él mismo explicaba en sus redes sociales la historia que hay detrás de su familia. "Hace siete años, la vida de mi familia y la mía cambió por completo. A mi madre le detectaron cáncer. Una palabra que todos hemos escuchado varias veces, pero que cuando conocemos y le plantamos cara, da realmente miedo...", explicaba en su cuenta de Twitter.

"A pesar de todo, ella decidió enfrentarlo y si mi madre ya era mi reina, en ese momento se convirtió en mi Dios y en mi religión", añadía Agoney: "Ella, la que nunca se rindió y se hacía más fuerte con cada golpe. La que nos cuidó y nos enseñó con sus actos, no con palabras. La que construyó mis alas para poder volar. Ella... ella es mi madre".