Este lunes, se celebró el funeral de despedida a María Teresa Campos en Madrid. Un acto multitudinario al que asistieron amigos íntimos, compañeros del mundo de la televisión, de la cultura y varias autoridades o personalidades políticas. Sin embargo, hay quien ha cuestionado la forma en la que se desarrolló esa misa y Alessandro Lequio ha sido uno de ellos.
Fue una cita muy emotiva en la que tuvo cabida la música, con actuaciones musicales como la de Miguel Poveda. "Al final un funeral no deja de ser un acto social donde te juntas para recordar la figura de una persona", ha comentado Joaquín Prat inicialmente en el club social de 'Vamos a ver'.
"Estoy de acuerdo, es un acto social, pero es opinable. Por supuesto que cada uno puede despedir a su madre como quiera, pero anoche me llamaron varias personas y amigos que viven por la zona y estaban bastante molestos con el párroco. Es un cura muy famoso y conservador y me dicen que suele ser muy estricto con su liturgia. Por eso, a muchos de sus feligreses les ha extrañado que en su iglesia permitiese este festival tan poco canónico", ha soltado sin pudor Alessandro Lequio.
"No fue un festival Alessandro, ese calificativo sobra", le ha reprochado Kike Calleja. "Yo os he escuchado, respeto vuestras opiniones", ha insistido el conde en una actitud desafiante. "Es que estábamos allí", le han cortado Pepe del Real o Adriana Dorronsoro. "Para mi una iglesia es un lugar al que se va a rezar y punto. Si tú quieres hacer un concierto, lo haces en un teatro, no lo haces en una iglesia", ha continuado bramando Lequio sin ceder en su postura.
Por su parte, Sandra Aladro ha aclarado cómo sucedieron los hechos realmente y ha desmentido las palabras de su compañero: "Hubo una intervención musical de inicio y una de cierre; y luego hubo una liturgia y unas lecturas religiosas y personales. No fue ningún tipo de festival".
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