Ramón García, ante el duelo del ‘Grand Prix’ y ‘Supervivientes’: «Lógicamente se van a moderar las audiencias»

Después de haber arrasado en audiencias durante el pasado verano, TVE vuelve a confiar en ‘El Grand Prix‘ para este 2024. Este lunes 8 de julio es el día fijado para el gran estreno de la nueva temporada del concurso, en el que volveremos a ver a Ramón García junto a Cristinini, Wilbur y la vaquilla en nuestras televisiones. ¿Qué nuevas pruebas veremos? ¿Cómo van a sustituir a Michelle Calvó tras su forzosa marcha?

Hablamos en exclusiva de todo ello con Ramón García, que predice también cómo cree que van a ser las audiencias de esta segunda edición del programa, que tendrá que hacer frente a la todopoderosa competencia de ‘Supervivientes All Stars’ tras una maniobra de programación de Telecinco al mover el ‘Tierra de Nadie’ del martes al lunes para eclipsar su regreso. ¿Veremos al presentador algún día en la Velada de Ibai Llanos, íntimo amigo suyo? ¿Habrá Grand Prix estas Navidades?

Ramón García, vuelves por segundo año consecutivo a ‘El Grand Prix’. ¿Cómo tomas tú esta acogida de nuevo?

RAMÓN – Bueno, muy contento, muy feliz, igual que la vuelta del año pasado. Pues este año para rematar, con juegos nuevos, con un montón de novedades que espero gusten tanto como el año pasado.

¿Qué me puedes contar de estos juegos nuevos que vienen?

RAMÓN – Pues poco, porque tenéis que verlo, pero que encajan perfectamente un poco en lo que es ‘El Grand Prix’, en las yincanas, en la piscina que tenemos preparada. De manera que ya como los hemos visto y los hemos probado, yo creo que van a gustar mucho.

No se ha podido recuperar la Cucaña, la querida Cucaña. ¿Por qué?

RAMÓN – Sí, pues la Cucaña no se ha podido recuperar por un tema de seguridad. Ahora la seguridad está más pendiente que nunca de todo lo que suceda en televisión y había una serie de juegos que por alturas, por ejemplo, en el caso de la Cucaña, no se podía hacer. Hay que ponerse unos arneses, entonces había que cambiar de concursante a otro y ralentizaba mucho el juego, que eso tiene que ser uno detrás de otro, pero bueno, lo intentaremos afinar, a ver si algún año la podemos recuperar.

Vemos que la cabina del streamer se ha mudado. ¿Cuál va a ser la función de Cristinini?

RAMÓN – Sí, pues Cristina va a estar conmigo retransmitiendo los juegos, que a mí me ayuda mucho, porque es un poquito repartir entre los dos esa retransmisión. Luego tiene un montón de sketches que cubre también con Wilbur o con La Vaquilla. Está pendiente de la patata caliente… La verdad es que Cristina hace un trabajo estupendo en este ‘Grand Prix’.

Hemos visto la partida de Michelle Calvó, por cuestiones laborales. ¿Cómo vas a afrontar tú también coger el papel de ambos?

RAMÓN – Cuando empezó el ‘Grand Prix’, el programa lo hacía yo solo. Al final hay que ir amoldándose y nos ha dado mucha pena que no esté Michelle por su trabajo, por la serie que está rodando, pero lo coincidía en fechas y no ha podido ser. Entonces, bueno, pues nos hemos repartido nosotros.

El año pasado lo petasteis en audiencias, pese a que hubo una brecha de tiempo sin ‘El Grand Prix’. ¿Qué esperáis este año?

RAMÓN – Hombre, yo creo que se van a moderar, lógicamente, las audiencias. Ya no es la novedad del año pasado después de 18 años, pero seguro que va a ir bien. Nosotros tenemos que estar por encima de la cadena, por encima de esos datos, que es lo que te piden siempre los programadores. Yo creo que eso lo vamos a cumplir y que sea la referencia una vez más para la familia. Yo con eso me siento más que satisfecho.

Te vimos en las Campanadas con Ibai Llanos, tengo que preguntarte, no sé si se ha pensado que venga algún día, que haga una intervención.

RAMÓN – No, se pensó el año pasado, porque con Ibai mantenemos una excelente relación. Lo que pasa es que la agenda de Ibai es endiablada. Entonces, intentamos el año pasado, en la vuelta de ‘Grand Prix’, cruzar algunas cosas en algunos programas, pero fue imposible.

No sé si te verías en ‘La Velada’ de repente.

RAMÓN – No sé yo, igual de espectador, para echar un buen rato.