Ana Rosa no detiene la sangría de audiencia y cae al unidígito en las tardes de Telecinco

Ana Rosa Quintana no está teniendo un buen comienzo en las nuevas tardes de Telecinco de la mano de ‘TardeAR‘ y ese reinado que ostentaba en la mañana no se ha revalidado. Tras su frío estreno, que se saldó con un poco halagüeño 11,3% de share, los datos han ido en picado.

Desde entonces, el programa se ha movido entre el 10 y 11% de cuota de pantalla, siendo superado con creces por ‘Y ahora Sonsoles’ y, especialmente, por ‘La Promesa’ en La 1 de TVE, cuyo liderazgo es inquebrantable. Sin embargo, este miércoles, ‘TardeAR’ caía por debajo de la barrera psicológica del 10% y anotaba mínimo histórico con un mal 9,8%.

Se trata de su primer unidígito y en ello tuvo mucho que ver la otra cara de la moneda: el máximo histórico de la serie diaria de TVE, que cosechó un gran 14,4% de share en el segundo capítulo de la tarde. Antes, el primero, también reinó sobre el resto de ofertas vespertinas con un buen 12,8%.

Al igual que Ana Rosa, Sonsoles también experimentó una bajada. Aun así, se mantuvo en un 10,8%. En cambio, quien no triunfó en su debut fue Jordi González con ‘La Plaza’. La nueva apuesta por el directo de la cadena pública no aprovechó las herencias de ‘La Promesa’ y se estrenó con un escueto y poco prometedor 7,8%.

En la mañana, Telecinco sigue desangrándose. La única franja que controlaban hasta el momento, incluso a pesar de la crisis en la que está inmerso el canal, era la matinal con la marca ‘El programa de Ana Rosa‘. Sin embargo, los nuevos magacines que han llegado esta temporada con motivo del salto de Quintana a las tardes han pinchado y han cedido el liderazgo a la competencia.

‘La mirada crítica’ de Ana Terradillos firmó mínimo histórico también con un bajísimo 9% de cuota y siendo cuarta opción en ese tramo horario. Por su parte, ‘Vamos a ver’ con Joaquín Prat también cosechó uno de sus peores datos con un débil 10,9%, convirtiéndose igualmente en cuarta opción. Si estas métricas las unimos al naufragio cada vez más pronunciado de ‘TardeAR’, la conclusión es clara: Mediaset está pagando muy caro su aberrante operación tras cancelar ‘Sálvame’.