La jugada maestra de una concursante de ‘¡Allá tú!’ que termina de semejante manera

La segunda concursante de la noche dominical de ‘¡Allá tú!’ ha sido María. Se trata de una joven encargada de tienda y maquilladora cuyo objetivo en el programa es poder regalarle unas vacaciones a su padre. Un deseo que ha podido cumplir puesto que la aspirante ha salido del concurso con la nada desdeñable cifra de 26.000 euros.

Al contrario que lo sucedido con el concursante anterior, María se ha estrenado descartando dos tarjetas rojas. «Es muy buena, hemos empezado muy bien», ha exclamado Jesús Vázquez. Por su parte, la aspirante confesaba ir levantando cajas al azar. Una estrategia que le ha acompañado durante las primeras rondas al lograr descartarse los peores premios.

El que no ha tardado en aparecer ha sido el banquero, que le ha ofrecido 4.200€. Una cantidad que la concursante ha acertado con lo cual se hace con una importante ventaja de cara a su continuidad en el concurso. Esto ha quedado patente en que, tal y como ha indicado el presentador, la maquilladora sumará mil euros más a cada propuesta del banquero.

A pesar de la buena marcha que llevaba el concurso de María, las decisiones de la joven han provocado un drástico giro. «Ha sido una jugada bastante mala», ha reconocido el presentador. Al escucharle, la concursante la tildaba de «horrorosa» además de apuntar: «He perdido todo lo bueno. Es muy triste».

‘¡Allá tú!’ pone contra las cuerdas a la concursante

En concreto, el maestro de ceremonias ha tomado la palabra para calificar la situación de extrema puesto que María todavía tenía opciones de hacerse con los 250.000€ a pesar del alto número de cajas malas que acumulaba. Poco después, el banquero ha llamado para ofrecerle 26.000€. «Me los voy a quedar», suspiraba la joven antes de que Jesús Vázquez le advirtiese que aún tenía en juego 250.000€.

Después de consultarlo con sus compañeros, María ha comunicado su decisión final: «Me los voy a quedar porque mi madre siempre me dice que no hay que ser avariciosos y que es mejor lo que puedo tener aquí que lo que pueda tener ahí». Unas palabras con las que María ha vendido su caja antes de conocer la cantidad que tenía en su interior: 10.000 euros. Una jugada maestra por la que María ha sido vitoreada en plató.