Exclusiva: José Luis García Pérez y Ana Wagener, fichajes de ‘Las noches de Tefía’ en Atresmedia

José Luis García Pérez y Ana Wagener se incorporan al reparto de ‘Las noches de Tefía’ junto a Patrick Criado y Marcos Ruiz.

‘Las Noches de Tefía’, la nueva serie de temática LGTBI que prepara Atresplayer Premium sigue cerrando su reparto. Después de adelantar en exclusiva a uno de sus protagonistas, Patrick Criado, y de que Vertele anunciara a Marcos Ruiz; ahora en El Televisero avanzamos en exclusiva otros dos nombres que se suman al reparto de la serie.

Se trata de dos actores consagrados como José Luis García Pérez y Ana Wagener. García Pérez vuelve así a la televisión tras ‘El Cid’ y ‘Hospital Valle Norte’; mientras que Wagener sigue ligada a Atresmedia después de haber participado en ‘Alba’.

‘Las noches de Tefía’ es una ficción que desafía las etiquetas en la que se entremezclan el drama, la comedia y lo musical. Está producida por Atresmedia Televisión en colaboración con Buendía Estudios y contará con 6 episodios de 50 minutos.

Patrick se meterá en la piel de ‘La Vespa’, uno de los jóvenes homosexuales encerrados en ese campo de concentración, que vivirá una gran historia de amor con el otro protagonista, Airam; que estará interpretado por Marcos Ruiz.

Por su lado, José Luis García Pérez dará vida a uno de los carceleros al igual que Roberto Álamo; mientras que Ana Wagener se meterá en la piel de la ex-mujer de Airam, el papel interpretado por Marcos Ruiz, años después de abandonar el campo de concentración.

Así es ‘Las noches de Tefía’

Entre 1954 y 1966 existió, en un paraje desértico de Fuerteventura, un campo de concentración franquista conocido con el eufemístico nombre de Colonia Agrícola Penitenciaria de Tefía, donde el régimen enviaba a los condenados por la ley de vagos y maleantes que, a partir del 54, fue implementada para incluir también a los homosexuales.

Airam Betancor rememora en el 2004 los terribles dieciocho meses que estuvo preso en la colonia cuando apenas contaba 17 años condenado por este motivo. También recuerda cómo uno de sus compañeros de barracón contaba historias por la noche para aliviar los sufrimientos del día. En esas narraciones nocturnas surge El Tindaya, un cabaret imaginado donde cada uno de los presos tiene un alter ego. Un espacio de libertad en el que todo es posible.