No es la primera vez que el colaborador deja sin palabras a los espectadores por sus cambios estéticos
Kiko Matamoros cada vez está más acostumbrado a las críticas y miles de comentarios que recibe cada vez que parece algo cambiado en cada una de sus intervenciones televisivas. Desde su último gran cambio, en el que se puso en manos de Carla Barber, Kiko no había aparecido tan cambiado.
Las redes sociales se han revolucionado durante la emisión del segundo capítulo de 'Cantora: herencia envenenada', especial sobre la herencia de Paquirri. El espacio contó con la hermana del diestro, Teresa Rivera, entre los principales reclamos.
Asimismo, el programa también contó con algunos de los colaboradores más reconocidos de 'La Fábrica de la Tele', productora del especial y de programas como 'Sálvame'. Por este motivo, algunos de los colaboradores fueron habituales de los platós de Telecinco como Mila Ximénez, Antonio Rossi o Kiko Matamoros.
La aparición de este último ha llenado las redes sociales de comentarios sobre su imagen, no solo por los pequeños cambios a los que se haya podido someter, sino por la atmósfera generada en plató. El estudio, con luces y ambiente lúgubre, ha sido el peor escenario para Matamoros. El motivo que explica la enrarecida imagen del tertuliano es la luz que le hacían destacar numerosas venas en la cabeza.
Desde que explotase el escándalo entre Isabel Pantoja, su hijo y la herencia de Paquirri, uno de los colaboradores más informados ha sido Kiko Matamoros. Además, ha sido de los pocos que se ha atrevido a cargar contra la tonadillera. En el último programa, sin ir más lejos, acusó a la cantante de haber falsificado el famoso lote de esmeraldas.
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