Tras visionar los conflictos de la semana, parte de los habitantes de la casa se alzaron contra la ex gran hermana y su actitud durante las galas del programa.
"Me molesta que no se valore que dos personas con la ayuda de tres o cuatro se metan en la cocina para hacer de comer". Con esta intervención de Antonio David Flores comenzaba una discusión que terminaría con Adara hecha un mar de lágrimas. El concursante, visiblemente molesto, le echaba en cara a Adara su cambio de actitud durante las conexiones en directo. Según él, su compañera apenas interactúa con el resto a lo largo de la semana y estaría aprovechando los momentos de máxima audiencia para conseguir protagonismo discutiendo.
"Yo no tengo experiencia en la tele. Yo no aprovecho nada" se defendía ella. Tal alegato provocaba la indignación de muchos habitantes, entre ellos Alba Carrillo, que recordaba que Adara ya estuvo en Guadalix y conoce perfectamente el funcionamiento del reality. "Me da mucha impotencia porque no me salen las palabras, me pongo muy nerviosa" rompía a llorar la ex gran hermana, a lo que la modelo contratacaba: “¿Cuando discutimos y me dejó con la palabra en la boca también estaba nerviosa?”.
Tan solo el Maestro Joao acudía en ayuda de Adara, y lo hacía tras ser preguntado por Jorge Javier. “Ella me ha pedido que no intervenga” aclaraba el adivino. “Estoy cansado de los mártires. Cuando lloráis a ninguno de los dos se os cae ni una lágrima" gritaba Antonio David, ganándose unos cuantos aplausos.
La guerra se traslada a plató
Tras ver los porcentajes, Lucía Pariente hacía suya propia la guerra de su hija Alba Carrillo y no dudaba en insinuar que Adara estaría más enamorada de Hugo Castejón que del padre de su hijo. "Uy qué enfadaditos. Tened cuidado no vayáis a discutir mañana. Que el problema lo tenéis vosotros" insinuaba ante la indignación de los implicados, que calificaban su actitud de sucia y maleducada.
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