La crítica de la semana: El presente es de ellas

ANÁLISIS DE AUDIENCIAS | Semana del 23 al 28 de abril de 2018

La televisión, al igual que el planeta, sería un auténtico despropósito sin la presencia del género femenino. En esta semana marcada por la injusticia, las mujeres volvieron a demostrar que son ellas las que mueven el mundo.

“Parece que quieran que nos maten”, así de contundente y certera se mostraba Sandra Sabatés el pasado jueves tras la sentencia del caso de La Manada, ‘El Intermedio’ marcaba esa noche un estupendo 10% de share. Rara es la cara televisiva que no ha mostrado su disconformidad al respecto, aunque en algunos casos han sido esas propias caras las que en su día pusieron en duda el testimonio de mujeres violadas o intimidadas sexualmente. A pesar de algún que otro ejercicio de cinismo, la respuesta de los profesionales del medio ha sido unánime. A veces parece que nada sucede en el mundo hasta que una voz de la pequeña pantalla decide visibilizar una injusticia social. En el caso de Sandra Sabatés no es una más que decide subirse al carro, ella y su programa son de los que siempre que pueden aprovechan la oportunidad para poner el foco en causas hasta el momento poco populares. ‘El Intermedio’ sabe despertar la conciencia crítica de un espectador avasalladlo por tanto megáfono mediático tendencioso.  Es de agradecer la tasca desarrollada por el programa de Wyoming  durante todos estos años, de los pocos resquicios de objetividad que todavía existen en España. Si todos los españoles vieran ‘El Intermedio’ viviríamos en un país mucho más justo.

No ha sido hasta 2018 que en España se ha estrenado en televisión una ficción de época claramente feminista. Con ‘La otra mirada’ todo hacía presagiar que estábamos delante de la enésima serie de TVE que decide recrear acontecimientos del siglo pasado, pero de repente, uno se sentaba frente al televisor y ante los discursos reivindicativos de una de sus protagonistas iba quedando gratamente sorprendido. Es la historia mil veces contada de la profesora que viene con ideas nuevas a revolucionar un colegio de moral conservadora, lo novedoso de esta historia es que los hombres tienen un papel de meros figurantes. Aquí no hay ningún galán que sitúe a los roles femeninos en la posición de floreros anhelantes de cariño, ni ningún compañero de trabajo que “apruebe” las decisiones de sus respectivas. En ‘La otra mirada’ lo que se proyecta es un discurso de mujer empoderada en un campo tan básico para la igualdad de género como es la educación. Más allá de deleitarnos con su reivindicación, la serie no tiene grandes pretensiones argumentales pero consigue ser un pasatiempos amable para los miércoles por la noche. Como en una novela de María Dueñas en la que la historia te acuna pero no requiere de grandes esfuerzos mentales, la nueva ficción de La1 ofrece una factura impecable en lo que a la dirección de arte refiere y unas interpretaciones más que solventes. Lamentablemente la serie pasó bastante desapercibida y tuvo que conformarse con un escueto 9,6% de share.

Sofía Suescun no es que digamos un ejemplo muy representativo de la lucha feminista pero su capacidad para generar espectáculo es innegable. El 80% de las tramas de esta exitosa edición de ‘Supervivientes’ giran entorna a la ganadora de Gran Hermano 16. Tal es la popularidad de la gran hermana que si uno escribe la palabra Sofía en Google el apellido que aparece pegado en primera posición es el de la hija de Maite Galdeano; ¿qué pensará la reina emérita tras verse destronada por una veinteañera malhumorada?. La Suescun, que era uno de los nombres flojos de la edición y que justificaba su presencia en el concurso por ser la novia del exnovio de la hija de una tonadillera que estuvo en la cárcel, tiene un talento innato para los realitys. Con ella llegó la polémica, ya sea en forma de triángulo o cuadrilátero amoroso o discutiendo con el primero que decida contrariarla en lo más mínimo. Gracias a ella, o en parte por ella, los datos de esta edición de ‘Supervivientes’ siguen siendo estratosféricos: el martes marcaba un estupendo 24,2% de share y el jueves subía hasta un apabullante 30%.