Divinity ha ofrecido el capítulo 104 de 'Mía es la venganza' este jueves. Poco a poco la serie se va acercando a su fin, que está previsto para el próximo viernes, 10 de noviembre, con la emisión del episodio 110. Ahí está fijado su desenlace después de que Mediaset ordenara paralizar el rodaje y precipitar el final.
En el capítulo de hoy, Mario y Olivia han acercado posturas después de que la CEO de Los Olivos haya visitado a Lola en prisión para tranquilizarle y garantizarle que entre ella y Mario no va a volver a pasar nada. Ella está centrada en sus planes de boda con Bosco mientras desconoce que su chico le ha sido infiel a semanas del compromiso.
Sin embargo, ese acercamiento no ha aplacado la sed de venganza que Mario guarda contra Sonia Hidalgo. Por ello, ha ordenado a Montes que cumpla sus directrices y le grabe alguna información delicada que le implique en algún delito. Entretanto, Jaime, compinchado en ese plan de venganza, ha acudido a la cita de Montes con el prestamista Ruano como valedor del expolicía y ha saldado la mitad de su deuda.
Mientras tanto, Sonia Hidalgo, que quiere recuperar su relación con Alejandro, ha planeado un encuentro entre Henri e Isabel para despejarse el camino y que quien es su abogado rompa con su amiga. Lo ha hecho con ayuda de Montes, que, por indicación de Sonia, se ha presentado en su despacho advirtiendo de que había visto a Isabel emparejada con otro hombre en un hotel.
Alejandro, al escucharle, ha marchado rápidamente a ese hotel donde Sonia había orquestado dicho encuentro y ha descubierto que Isabel se había acostado con Henri. Les ha pillado in fraganti en la cama. Un palo para Alejandro e Isabel, que desconocen que realmente no ha sido una pillada fortuita, sino inducida por la dueña del club.
Capítulo 105 de 'Mía es la venganza' – Viernes 3 de noviembre
Mario y Jaime presionan a Montes para que se encuentre con Sonia y le saque información comprometida. La intención de Mario es conseguir grabar las conversaciones, pero Jaime las elimina sin que este se percate. Por otra parte, Mario recibe el aviso de que Lola ha sido ingresada en el hospital tras sufrir un fuerte mareo. La preocupación por su estado es máxima.
Entretanto, Orson descubre que Fernando ha planeado un viaje con Blanca para tomarse un respiro y reflexionar sobre sus sentimientos por el chef y por Andrés. Su corazón está dividido. Asimismo, Alejandro se encuentra totalmente desaparecido tras descubrir a Henri e Isabel juntos en una habitación de hotel.
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