Tras un primer ensayo en el que no pudimos ver más que tres fotografías, este sábado Melody ha vuelto a subirse al escenario del St. Jakobshalle de Basilea para su segundo ensayo de cara a su actuación en Eurovisión 2025 con "ESA DIVA". Y en esta ocasión si que hemos podido disfrutar de las primeras imágenes en movimiento con un vídeo de 30 segundos con realización.
Como bien pudimos saber después del primer ensayo, la puesta en escena de "ESA DIVA" cambia radicalmente con respecto a la propuesta que vimos en el Benidorm Fest 2025. Ahora, la actuación se divide en tres actos distintos y el objetivo es mostrar a Melody como una diva "valiente y poderosa" a través de varios elementos y haciendo honor a la letra de la canción.
El director artístico ha apostado por convertir el escenario de Eurovisión 2025 en un gran teatro al que Melody llega con un vestuario elegante y evocando a las grandes divas del pasado. Poco después al igual que hace la canción, el concepto va virando hacia lo contemporáneo por lo que la puesta en escena apuesta por elementos visuales más modernos según va avanzando el tema.
El gran pilar de esta propuesta es la presencia escénica de Melody y su gran personalidad. Y es que la artista aprovecha al máximo cada rincón del escenario y su presencia es la que guía todos los elementos visuales que vamos viendo a lo largo de la actuación. Los cambios de ritmo y de atmósfera se suceden de forma fluida, manteniendo siempre el foco sobre ella.
Una vez más, Melody está acompañada de sus cinco bailarines (Álex Bullón, Vicky Gómez, Marc Montojo, Ana Acosta e Iván Matías Urquiaga) todo bajo la dirección coreográfica de Mónica Peña y el propio Bullón. El equipo de baile lleva a cabo una coreografía que combina los pasos ejecutados al unísono con otros movimientos más libres en los que cada uno deja entrever su personalidad y su estilo sobre el escenario.
El vestuario de Melody para brillar en Eurovisión
Y como ya pudimos ver en su primer ensayo, el vestuario de Melody para Eurovisión 2025 es también diferente al que vimos en su momento en Benidorm. Nada más empezar arranca con un vestido negro de cola que reinterpreta la tradicional bata de cola andaluza, conectando con los orígenes de la cantante. Es un vestido muy estructurado cuyos volúmenes recuerdan a las espinas de un rosal, en referencia a la letra de la canción. Y también porta un sombrero cordobés.
Durante la actuación Melody se desprende de dicho vestido y se queda con un body plateado hecho de manera artesanal con flecos y con más de 15.000 cristales de diferentes tamaños. Es una creación del diseñador ilicitano Gustavo Adolfo Tarí. El objetivo es proyectar una imagen de diva contemporánea sobre el escenario europeo.
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