Toñi Moreno sufre el peor momento de su embarazo cuando la gestación ya va muy avanzada.
La cara de Toñi Moreno dice absolutamente todo. La presentadora, que comparte su día a día del embarazo de Lola en las redes sociales, no ha ocultado lo mal que está en este punto. No tiene ganas de levantarse y siente que no tiene fuerzas para continuar con el embarazo. Y es que compaginar este momento de su vida con el trabajo ('MyHyV') es complicado.
Aunque, con su actual estado, no son alarmantes sus palabras. Las hormonas están haciendo de las suyas y le están robando las fuerzas y energías para casi todo. No fue el caso en los vídeos que grabaron para sus seguidores en las redes sociales.
Así, la periodista se encuentra junto a su preparadora física, Raquel López. A juzgar por el rostro, era visible que Toñi Moreno no tenía ninguna gana de ponerse a realizar el entrenamiento premamá. Toñi Moreno le pedía piedad a su entrenadora y, con su gracia y naturalidad habitual.
Y lo cierto es que llegaron las risas. Aún con el rostro cansado, el desparpajo de la presentadora, que ya es casi su sello personal, hacía que ambas intercambiaran unas carcajadas incluso antes de empezar con la sesión tan temida por Toñi.
«La verdad es que estoy fatal. Estoy que no puedo. No sé ni como me llamo», le decía Toñi Moreno a su entrenadora en busca de algo de esa compasión y libertad. Tras un buen rato de distensión y risas, Toñi Moreno volvió a tirar de su humor característico. «Esto no es fácil. Los que dijeron que el mejor estado de la mujer era el embarazo era un tío», comentaba con gracia la presentadora.
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