La "voz" de Telecinco no se rinde: demandará al canal por despedirle en baja médica

La sentencia judicial apoya a la cadena de televisión mientras que el demandante piensa recurrir por tercera vez consecutiva la decisión del juez.

La voz de Telecinco, Casimiro Díaz, ha escrito en su blog personal: “Me llamo Casimiro Díaz, y durante los últimos 15 años de mi vida he sido la voz corporativa de Mediaset”. Nadie ha visto a Casimiro, sin embargo, todo el mundo le ha oído ya que era la voz de programas y series de éxitos de Telecinco como: ‘Gran Hermano’, ‘Hospital Central’, ‘Supervivientes’ o ‘Pasapalabra’.

En el blog, Casimiro señala: “En abril de 2015 sufrí un desprendimiento de retina en mi ojo izquierdo que me obligó a ser intervenido de urgencia y a permanecer en la cama inmóvil durante algo más de un mes”. Tras esta operación, pidió la baja médica y aquí fue donde La empresa italiana audiovisual dejó de pagarle el suelo según detalla en su blog personal: “Mediaset argumentaba que como no grababa locuciones, no tenían por qué pagarme cantidad alguna”. Sin embargo, la cosa no quedó ahí ya que Casimiro quiso reconocer sus derechos laborales en un juzgado: “En julio del mismo año me presenté en los juzgados de lo social, una demanda contra Mediaset”. Tras todo lo ocurrido, a los dos meses, la voz de Telecinco fue despedida de manera fulminante y sin alegar motivo alguno.

En su blog sigue relatando los tejemanejes de la cadena italiana: “Mediaset intentó evitar el juicio haciéndome una oferta económica ridícula, a sabiendas de mi situación extremadamente delicada”. Finalmente, la resolución judicial fue clara: apoyar a Mediaset. Por otro lado, Casimiro no se quedó de manos cruzadas y en su día, recurrió la sentencia del juez: presentando otra de contraste en la que se dio una situación parecida, pero con un final muy distinto. La justicia apoyaba al otro trabajador.

Según ha informado el demandante a la Cadena SER, Mediaset volvió a ganar el recurso que el mismo interpuso en los tribunales, siendo éste el tercer intento que hace Casimiro por ganarle la batalla legal y profesional más dura de su vida a la empresa de Telecinco.