Chiqui denuncia en 'Sálvame' las agresiones de sus ex suegros tras su divorcio de Borja

Chiqui acudió a 'Sálvame' para denunciar el trato que está recibiendo por parte de los padres de su ex marido Borja.

Este miércoles 28 de octubre, Almudena Martínez 'Chiqui' visitaba 'Sálvame' para relatar el calvario que está viviendo desde que se separara de su marido, Borja, a finales del 2019. Tras una década juntos y dos hijas en común, el matrimonio ponía fin a su relación. Pero, como todos ya sabemos, de forma nada amistosa.

Desde entonces, la exgran hermana se ha volcado en el cuidado de sus hijas: Alma y Bella, su mejor medicina en estos duros momentos que está atravesando. Ella misma definió en el programa de Telecinco su matrimonio como un "infierno", y hace poco el exmatrimonio se tuvo que ver las caras en el juzgado sin llegar a ningún entendimiento.

Pero no solamente Borja le estaría haciendo la vida imposible a Chiqui, sino que los padres de éste no estarían ayudando a lograr el entendimiento. Sino más bien todo lo contrario. Así lo ha explicado la propia Almudena este miércoles en 'Sálvame'. "Desde que yo me divorcié mis suegros ya no entran en mi casa, un día esta señora (refiriéndose a su suegra) fue un día a buscar a mis hijas y se creyó Kung Fu Panda y me rompió una puerta".

Chiqui asegura que sus exsuegros le hacen la vida imposible

"Yo no pasé miedo pero me han llegado a pedir documentos como mi pasaporte, mi DNI… y no sé para qué. Yo todo se lo digo a mi abogada y es que flipan", ha explicado Chiqui a Jorge Javier Vázquez y al resto de colaboradores del programa.

Según ella, sus ex suegros han llegado a insultarle y llamarle "de todo". Además, ha confesado que en estos momentos la relación con su ex es nula, pero tiene que ver a sus ex suegros por temas relacionados con las dos niñas.

"No quiero nada con Borja y no quiero verle. No soy una delincuente, igual creen que voy a dejar el país… Mi casa es mía y como en ella mando yo nadie entra que yo no quiera, pero me han roto la puerta. Me dicen cosas muy feas que no deberían de escuchar mis hijas pequeñas. Estoy hasta el moño y está denunciando. Nunca me han querido", ha sentenciado Chiqui, muy apenada por la situación.