Jana sigue sin dar señales de vida en La Promesa. El encargado de las diligencias comunica que no le han visto en ningún pueblo de los alrededores de Luján. Y la desesperación de Manuel va en aumento, lo que no frena a Cruz y a Lorenzo para que metan baza contra Jana y se dé cuenta de que tenía una venda con la antigua doncella.
Lo que desconoce la marquesa es que ha sido pillada por María Fernández hablando con Gloria Ros y que su secreto puede estar en peligro. De descubrirse, Cruz está perdida. Mientras, la institutriz se despide de palacio y eso genera muchas habladurías y sospechas en el servicio.
Cruz ha averiguado información sobre la madre de Santos y lo que descubre da un giro a la historia: realmente no está muerta como el lacayo piensa y como Ricardo ha hecho creer, sino que le abandonó cuando era un bebé.
Catalina sigue completamente hundida, pero es Martina quien la anima a despejarse un poco. Es en los jardines donde se encuentran a un intruso inesperado. Se trata de Pelayo, que vuelve tras su plantón sorprendentemente,
Inesperada fue la relación entre el pasado de Marcelo y el de Vera. La doncella está inmersa en un mar de dudas al respecto de qué hacer contra su padre: si denunciarlo ante las autoridades o no ahora que está a punto de cerrar un oscuro negocio con Alonso.
Contra Pía Adarre ha ido siempre Petra, pero ahora lo hace empleando el argumento de su relación con Ricardo. El ama de llaves hará todo lo posible por dinamitarla.
Avance de 'La Promesa' del capítulo del jueves, 19 de diciembre
Manuel, que hasta ahora había templado gaitas, decide arremeter contra todo y discute con Cruz por Jana, que sigue sin aparecer para desesperación de todos en La Promesa; y se desahoga con Alonso, que siente compasión por su hijo y le apoya cuando le suplica ayuda.
Tras abofetearle, Martina le pide a Pelayo que deje a Catalina en paz y le oculta a su prima, al meno por el momento, que lo ha visto merodeando en los jardines de La Promesa.
Manuel decide hablar con José Juan para hacerle entrar en razón e impedir esa boda con Curro, mientras Lorenzo le azuza. Samuel le cuenta a María Fernández cómo nació su vocación.
Y Marcelo y Vera deciden ir a la Guardia Civil para denunciar al duque de Carril. Vera ya denunció en el pasado a su padre pero compró todas las voluntades para evitar la cárcel. Sin embargo, ahora sabe que no tiene tanto poder económico para volverse a librar de ella.
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