'La Promesa' ha enloquecido a sus seguidores por cómo acabó el capítulo de este martes, en el que se vio cómo Jana se introducía en una recóndita cueva de Luján a altas horas de la noche. ¿Con quién se iba a reencontrar? ¡Con la mismísima Pía Adarre! Y es que, efectivamente y como algunos sospecharon, su muerte fue una farsa.
Un complot en la que están involucrados Jana, Rómulo y Alonso. Es por eso que el marqués se empeñó en que se guardara sepulcral silencio sobre ese supuesto suicidio que el resto de personas de La Promesa creen. Una treta para alejar la amenaza que supone Gregorio para la criada.
Veníamos de algunos capítulos en los que Petra sospechaba de que Rómulo y Jana se traían algo entre manos, pero ni de lejos puede imaginarse cuán de grande es ese secreto. No nos queremos ni imaginar cómo será la reacción de la señora Arcos cuando descubra que ese acto autolítico fue fingido.
Para conocer más sobre la situación actual de Pía hay que esperar al próximo episodio, concretamente el número 381, que ha quedado aplazado a mañana jueves, ya que, debido a la retransmisión de la Eurocopa 2024, se ha suspendido la emisión de La Promesa de este miércoles.
Con todo, los espectadores de la ficción diaria de TVE pueden respirar tranquilos porque el personaje de Pía Adarre no está muerto y, por tanto, no va a desaparecer. Como ya contó el creador Josep Cister en una entrevista a El Televisero, lo que se ha hecho con el papel de María Castro es un giro en el guion para reducir su presencia en la serie de forma temporal debido a la reciente maternidad de la actriz.
Avance del capítulo 381 de 'La Promesa' del jueves 20 de junio
Rómulo consigue evitar que Lope vuelva a las andadas con un método drástico. Virtudes y Simona hacen las paces y la joven se ilusiona con la posibilidad de recuperar a su hijo Adolfito.
Las sospechas de Margarita sobre la implicación de Martina respecto a lo sucedido a Ayala continúan. Por ello, registra, junto a María Fernández, la habitación de su hija en busca de indicios. Finalmente, acabarán encontrando pruebas que incriminan directamente a su hija.
Por otro lado, en la guerra, Curro escribe una carta a Martina. Adriano agradece a Catalina su generosidad, tras haber cancelado el préstamo del banco con la venta del collar.
Y, en contra de los deseos de Alonso, María Antonia ha conseguido quedarse en palacio y se reafirma en la irrefrenable atracción que siente hacia el marqués. ¿Le pasará a él lo mismo aunque lo disimule?
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