La dura revelación personal de Jordi Cruz en ‘Planeta Calleja’ que no había hecho nunca

Jordi Cruz se sinceró sobre la relación con su familia ante Jesús Calleja en el programa de estreno de la nueva temporada de ‘Planeta Calleja’

Jesús Calleja ha vuelto a Cuatro con su ‘Planeta Calleja‘ y con la visita del chef Jordi Cruz. Ambos han viajado hasta la Grecia más mitológica donde han charlado de su vida y los aspectos más íntimos de esta, hasta tal punto que el cocinero ha confesado la mala relación que tenía con su padre y cómo le ha afectado en todo su carácter.

«Mi padre no me dijo te quiero y yo se lo dije por primera vez dos horitas antes de morir. Siempre pensé que no me gustaría que mi padre se fuera sin haberle dicho te quiero», le confesaba Jordi Cruz a Jesús calleja, algo que le dejaba completamente alucinado. Sin embargo, el cocinero explicaba que su padre no era nada cariñoso, por lo que nunca se atrevió a decírselo antes.

Asimismo, contaba por qué llegó el día en el que le dijo te quiero: «Él tenía un alzhéimer bestial, y que esa mirada ya no contuviera nada me facilitó la tarea«. No obstante, Jordi Cruz insiste en que es una situación que tiene superada: «Estoy en un momento de mi vida que lo tengo bien gestionado. Me ha ayudado a ser más creativo, porque con esfuerzo las cosas que te parecen insalvables como superar la timidez o el mal carácter, las he ido superando».

«De niño todo lo malo que tenía era culpa mía. Él pasaba completamente de mí»

Porque cuando Jordi Cruz era pequeño, no contaba con el apoyo de su padre en momentos clave: «De niño todo lo malo que tenía era culpa mía. Él pasaba completamente de mí». Y cuando más necesitaba a su madre, ella tampoco podía estar pendiente de él, aunque no desvela los motivos: «Y mi madre tenía bastantes problemas en gestionar sus cosas».

El chef nunca recibió el apoyo de su padre ni siquiera cuando ya era un cocinero exitoso con sus propios restaurantes. Es más, se sorprendió cuando un día escuchó a su padre hablar con orgullo de él: «Un día le escuché con unos amigos suyos hablar de mí. Es la primera vez que escuché a mi padre decir algo con orgullo de mí. Y cuando murió, en su despacho encontré una carpeta con recortes de periódicos míos. No sabía mostrar afecto«.