Pablo Motos no se achanta y arroja este calificativo hacia Irene Montero en ‘El Hormiguero’

‘El Hormiguero’ ha vuelto a tener su particular tertulia de actualidad y Pablo Motos ha opinado sobre la dialéctica belicista que impera en el Congreso de los Diputados

Pablo Motos ha vuelto a mojarse en política en ‘El Hormiguero‘. Recordemos que el presentador viene de una de las mayores polémicas del año. Motos contestaba a una campaña del Ministerio de Igualdad en el que se señalaba indirectamente su machismo. Sin embargo, lo que no esperaba es que se le iba a volver en su contra y que iban a aparecer cientos de momentos en los que había tenido un comportamiento cuestionable.

Tras la tormenta, este jueves 1 de diciembre, Motos lo volvía a hacer y opinaba sin cortarse sobre la actualidad política. Tanto él como su mesa de actualidad, compuesta por Nuria Roca, Juan del Val, Tamara Falcó y Cristina Pardo, comentaban la acusación de Irene Montero al PP de ejercer la «cultura de la violación» o el insulto de una diputada de Vox a una de Bildu al llamarla »filoetarra».

Antes de pronunciarse Pablo Motos, era Cristina Pardo la que cogía la palabra: «Me da mucha vergüenza que los políticos no puedan tener una conversación normal y educada. Nosotros no vamos por la vida opinando sobre los demás todo lo que pensamos». Y añadía: «Me parece fuerte que no sean capaces de respetarse. Las cosas no están mal dependiendo de quién las haga. O están bien o mal».

Juan del Val, fiel defensor de Pablo Motos, tampoco se cortaba y cargaba contra los políticos. «Los representantes deben ser el reflejo de la sociedad. Pienso que la gente no se siente representada por los diputados porque viven de la polarización». Una argumentación que apoyaba su pareja, Nuria Roca, que también realizaba una crítica social: «Cada vez estamos más polarizados y cada vez esperamos más declaraciones de este tipo».

El último en pronunciarse era Pablo Motos que, sin dar nombres, ha señalado a algunos partidos políticos del Congreso de los Diputados. «Hay partidos que sin odio no son nada. Los medios de comunicación tenemos la culpa porque solo les damos voz cuando salen muy gordas», empezaba soltando. Para rematar: «Ojalá que cambien las cosas, pero me temo que no». En lo que sí era más claro era en su opinión sobre las últimas palabras de Irene Montero: «Es un disparate».