Joaquín Prat ha entrado en 'Cuatro al día' para hablar de su experiencia en 'Planeta Calleja'.
Joaquín Prat ha desaparecido esta semana de 'El programa de Ana Rosa' y de 'Cuatro al día'. El presentador se ha marchado a las Azores, pero no de vacaciones sino con Jesús Calleja. Así, el rostro de Mediaset será uno de los invitados de la próxima temporada de 'Planeta Calleja'. Y este viernes, conectó con su programa de Cuatro para dar a conocer cómo estaba siendo su aventura.
En el vídeo emitido en 'Cuatro al día' se ve a Prat realizando todo tipo de aventuras: desde buceando entre delfines hasta montando en bicicleta. En la conexión con Mónica Sanz, Joaquín revelaba que estaba "viviendo una aventura", aunque dejaba claro que pese a estar a miles de kilómetros de España, estaba muy informado de todo lo que estaba sucediendo a nivel informativo.
Asimismo, Prat y Jesús se han visto afectados por el enjambre sísmico que se ha vivido en la Isla de San Jorge en los últimos días. Y es que las Azores cuentan con más de 1.700 volcanes. Pese a todo, el aventurero dejó claro que "siempre tenemos un plan". Así, desveló que iban a estar bajo tierra por los tubos de lava del volcán.
Joaquín además no dudó en dejar claro que Calleja "me está llevando al límite". "Me está exprimiendo y forzando la máquina hasta límites insospechados". Era entonces cuando Mónica en tono de sorna preguntaba si su compañero iba a volver de una pieza. Y ha sido cuando Prat aprovechó para revelar lo que le había sucedido: "Tengo el culo casi en carne viva. No puedo dormir por las noches".
Un pequeño percance que confirmaba Calleja. "Me viene a la habitación para que le hagas las curas", contaba el aventurero en el directo con 'Cuatro al día'. Mientras que Mónica le echaba la bronca a su compañero por no echarse crema después de lo mucho que han incidido en el programa por protegerse del sol.
"Esto es un programa serio, no estamos en pelotas, esto ha sido del rozamiento de los arneses, los neoprenos, todo ese tipo de cosas", decía entonces Calleja. Por su lado, Joaquín confirmaba que se había quemado todo por las rozaduras del neopreno y los arneses que estaban utilizando para hacer las diferentes actividades.
"Te esperamos el lunes, te pondremos un pequeño flotador si lo necesitas para la silla", terminaba diciéndole Mónica a su compañero. Antes de despedir la conexión, Joaquín no dudaba en decir que estaba siendo una experiencia "maravillosa, única" y que era lo que "necesitaba".
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