Rocío Flores decidió ver el testimonio de su madre Rocío Carrasco con su novio y no con su padre Antonio David Flores, algo muy poco esperado.
Por primera vez tras dos décadas de ostracismo, Rocío Carrasco daba las claves de por qué lleva años sin tener un contacto con sus hijos Rocío y David Flores. De ello culpabilizó a su exmarido Antonio David Flores, al que acusó de habérselos quitado, de haberlos arrancado de cuajo, tal y como él mismo le advirtió cuando se separaron.
"Sesgó el vínculo. Aprovechaba las tomas de contacto cuando me entregaba a los niños y aprovechaba para increparme e insultarme. Me decía 'hija de puta, te van a odiar, te los voy a quitar'. Él ha conseguido lo que me dijo cuando nos íbamos a separar. 'Te vas a cagar Rociito'", empezaba relatando.
"Me los ha quitado. Ha hecho que me odien y que tengan mala imagen de mi. He tenido a mis hijos muertos en vida y he tenido que hacer como que no los tengo. Y haciéndoles partícipes de cosas que no tienen que serlo y ensuciar su mente. Eso no se hace con nadie y eso lo ha hecho él", continuaba Rocío.
Aunque lo más grave se produjo cuando profundizó en ese día 5 de agosto de 2019 cuando intentó quitarse la vida. "Llevo en tratamiento psicológico desde 2011 con un tratamiento fuerte y un diagnóstico. Síndrome de ansiedad grave y crónico. No lo digo yo, lo dicen los expertos. Quiero decir esto porque quiero explicar como estaba antes del 5 de agosto de 2019. Vengo de estar hundida durante mucho tiempo. De tener que hacer un ejercicio descomunal para salir de casa", explicaba.
"De repente me llega la noticia de que mi hija va a defender a su padre en GH VIP. Y por mi cabeza empieza a pasar todo lo vivido en los 20 años anteriores y todo lo que venía. Pero con un elemento más y era ver a mi hija en televisión. Yo no veía a mi hija desde el 27 de julio de 2012. No estaba preparada para verla a ella, pero tenía claro que no quería ver lo que venía", proseguía.
"No quería volver a sentir vergüenza ni seguir cuestionada por todo el mundo. Yo no quería seguir viviendo en esas circunstancias. Y ese día, 5 de agosto, decidí que no quería seguir viviendo. Ese día determino que no puedo más y que había hecho lo posible para que todo cesase. Y la única forma de que se terminara era quitándome del medio. Me tomé varias pastillas diferentes", desveló desgarrada.
"¿Quién te salvó?", le preguntaba la periodista. "Fidel, que entró en la habitación. En el hospital yo llegué prácticamente dormida. No recuerdo nada. En urgencias me preguntan y yo digo que no quiero seguir y que voy a conseguir suicidarme. Y que siempre voy a tener el puente de Segovia para tirarme. Me ingresaron. Tomo conciencia de la barbaridad que quería hacer. Me doy cuenta de lo que he hecho", lamentaba.
Más tarde, también ahondó en la agresividad física y verbal de Antonio David ya desde los primeros años de relación. "Me decía inútil, eres tonta, estás gorda, porque yo en esa época estaba más gordita (...) Cuándo terminaba el día y te ibas a la cama, te decía que 'yo te quiero, que lo hago por tu bien'. Yo decía: 'pues es verdad, cómo he dicho eso'. Y tú en ese momento no te das cuenta y llega un momento en el que lo normalizada. Hubo dos o tres veces donde la cosa pasó a mayores", confesaba por primera vez.
"Recuerdo un tirón de pelo, me tira hacia abajo. En ese momento, yo siento que me tengo que ir, pero sabiendo que no lo iba a hacer. Esa imagen la tengo clara. No tengo claro cómo termina, pero pasó a mayores. Me acuerdo que ocurrió de una cosa determinada. Yo estaba sentada en un sofá, mesa camilla. Me agarra del pelo y me dio con la cabeza en la mesa. Subió echándome a mi la culpa de todo lo que le ocurría, que no le merecía la pena estar conmigo. Que era todo por mi culpa", revelaba.
"Hay muchos episodios de mi vida que, no sé si por defensa, los tengo como olvidado (...) Yo en ese momento lo daba todo por bueno, lo justificaba y lo dejaba pasar. Me dijo que me fuera con mi madre y que era una hija de puta. Luego llegó un perdóname, estoy nervioso y el lloro. Y una vez más, yo le justifico, le creo y olvido. En aquel momento no sabía que iba a ser mi verdugo", sentenciaba al final de capítulo.
Con estas estremecedoras revelaciones de Rocío Carrasco, el foco se ha puesto, ya no tanto en Antonio David, sino en los hijos y muy especialmente en Rocío Flores. No lo vio con su padre. "Rocío Flores lo vio junto a su chico y sabemos que lo vio hasta el final para no perderse nada", han adelantado desde 'El programa de Ana Rosa'.
Además, el periodista y colaborador Antonio Rossi anticipaba también la primera reacción del colaborador. "Estaba muy tranquilo y se agarra en la única realidad que hay. Que le denunció por violencia de género y que ni si quiera hubo juicio oral. No va a dar un paso atrás. Me ha dicho que va a por todas", zanjaba.
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