Entrevistamos al actor horas antes de arrancar la segunda parte de la undécima temporada de 'La que se avecina'.
Amado y odiado a partes iguales, Antonio Recio puede presumir de ser el personaje más famoso de 'La que se avecina'. Racista, machista, xenófobo, homófobo, son las cualidades que este mayorista, que no limpia pescado, enseña en cada capítulo de la serie. Hablamos con el actor Jordi Sánchez, que da vida a Recio, y vuelve esta noche con el estreno de la segunda tanda de la undécima temporada.
"No tengo muy claro qué vamos a ver esta temporada. Hace ya mucho tiempo, y como hemos rodado ya más capítulos", nos explica Jordi Sánchez mientras hace memoria de lo que veremos de Antonio Recio esta temporada. "Me dejaban ahí en el limbo, me atropellaba el camión de Percebesa, vuelvo, porque no estaría aquí, y vuelvo con el carácter cambiante", prosigue.
"No sé lo que dura, tampoco os lo puedo decir, pero vamos a ver otro lado de Recio, a pesar de que Recio nunca cambia, nunca aprende, no evoluciona, pero el golpe le viene bien", avanza. Sin embargo, habla con cariño de su personaje: "a mí el personaje me encanta, como persona no me iría a cenar con él. Estos personajes que tienen todos los defectos humanos me encantan, pero jamás sería su amigo", confiesa Sánchez.
"El público quiere a Recio porque lo ve a través de la tele, y no es su vecino de verdad y porque en el fondo le castigan y todo le sale mal", reflexiona ante el cariño de la gente del personaje. "Es como un niño malo, que se enfada cuando algo le sale mal", matiza.
El final de la serie, cada vez más cerca
Este coma surgía de la incompatibilidad de Jordi Sánchez de grabar la serie y una película al mismo tiempo, pero confiesa que nunca ha querido abandonar la serie de los hermanos Caballero. "No porque podemos combinar proyectos. Nunca he tenido problema para compaginar cine y tele y eso que he hecho bastante cine", argumenta tras su poca presencia en la primera mitad de la temporada.
"Si te lo ponen bien por qué te vas a ir de una serie que te gusta, que te gusta el personaje, que funciona y donde la gente está contenta y a gusto", nos expone, ya que el ritmo de producción de 'LQSA' ocupa solo unos meses del año, dejando total libertad a los actores para ponerse a trabajar en aquellos proyectos que quieran. "Solo grabamos trece capítulos al año", explica el catalán.
Respecto al final de la serie, directamente no lo afronta. "Parece que nos vamos de Montepinar, me encantaría tener un spin off con mi familia", adelanta. "Un tío tan conservador con una mujer que se acuesta con media escalera, una hija transexual y monja, es una maravilla", fantasea con como podría ser esa continuación.
Enrique Pastor, su delfín hasta el fin
Además, ha aprovechado para reflexionar sobre la relación que tiene su personaje con el de Antonio Pastor. "Es raro, Enrique Pastor tiene mucha paciencia", reconoce entre risas. "Enrique Pastor es un tío que toca los pies en el suelo y este es un friki", añade Jordi Sánchez.
También ha habido tiempo para fantasear con los capítulos que se podrían hacer. "Yo le digo a Alberto que tengo ganas de cantar alguna vez, que hagan un capítulo musical, aunque no canto nada bien", confiesa. Sin embargo, a diferencia suya, su compañera Loles León mantiene que incorpora mucho al personaje. "Es una serie donde el guión tiene que estar sabido al dedillo, y es su gracia. Imagínate a veinte personas pidiendo cambios de guión, es una locura", concluye.
Sigue toda la información de El Televisero desde Facebook, X o Instagram