Todo ‘Sálvame’ alucinado con el secreto de Patricia Donoso que le vincula a Alessandro Lequio

Patricia Donoso ahora asegura en ‘Sálvame’ que es duquesa y que ha conseguido el título nobiliario como el abuelo de Alessandro Lequio

‘Sálvame‘ vive uno de sus mejores momentos de los últimos meses. Las audiencias le acompañan desde que hayan aparecido nuevas tramas y nuevos personajes como es el caso de Patricia Donoso. La joven ha acudido al plató de Telecinco este miércoles 2 de noviembre para hablar de sus orígenes. Y es que el programa ha hecho una investigación para desmontarla.

Patricia Donoso tenía que aguantar que el programa volviera a cuestionar su procedencia. En esta ocasión, ‘Sálvame’ se centraba en descubrir cuál es su nombre real, por lo que desplazaba un equipo hasta Sevilla (Colombia), su ciudad de origen, para acudir al registro civil a por más datos. Era precisamente gracias a esta investigación por lo que el magacín descubría que su nombre de nacimiento es Yéssica Erika Patricia Montoya García.

Pero la sorpresa llegaba cuando ‘Sálvame’ descubría que Patricia Donoso se había cambiado el nombre legalmente. Hace unos años se lo cambiaba a Cayetana de Alba García, algo que ha dejado bastante impactados a los colaboradores, dado que es el nombre de la duquesa de Alba. Por su parte, Patricia, lejos de negarlo, asentía con la cabeza dando la razón al programa.

Es más, Patricia Donoso soltaba una bomba en medio del plató de ‘Sálvame’ que dejaba a los colaboradores aún más alucinados. Anuncia que «de hoy en adelante» hay que llamarla de otra forma, en concreto por su título nobiliario: «Duquesa». Al preguntarle cómo había conseguido el mismo, Donoso aprovechaba para lanzar un recado a Alessandro Lequio: «Lo he conseguido como lo consiguió el abuelo de Lequio. Se lo compró al Papa de Roma. A mí me ha costado 1.200 libras».

Además, ‘Sálvame’ descubría la identidad del padre biológico de Patricia Donoso, un hombre llamado Olmedo Montoya. Sin embargo, Patricia insiste en que Olmedo hizo un favor a su madre al ponerse como padre, ya que su verdadero progenitor abandonó a su madre cuando estaba embarazada. «No es mi padre, si aparece en el registro debe darse con un canto en los dientes», decía Patricia sobre Olmedo.