La bautizada como 'Operación Ana Rosa' de Mediaset ha sido un auténtico tropiezo empresarial. El salto al vacío con el radical cambio de programación que se ha consumado en Telecinco en estos meses era previsible, pero la realidad finalmente ha sido mucho más cruda para una cadena que languidece sin freno y sobre la que pesa una desafección y una pérdida de identidad letal, jamás vista en su historia.
'TardeAR' llegaba esta semana a la parrilla del canal con la misión de levantar los malos datos que ha cosechado durante este verano 'Así es la vida', el programa parche que ha ocupado gran parte de la tarde desde que se produjo la cancelación de 'Sálvame' y que, ahora, ha quedado reducido a una hora.
Sin embargo, ese propósito ha saltado literalmente por los aires. Ana Rosa Quintana no revalida el título de reina de las tardes y sus datos no solo no han mejorado la franja vespertina como se esperaba, sino que además no están consiguiendo igualar a los resultados con los que se despidió el extinto formato de La Fábrica de la Tele.
'Sálvame' se situaba entre el 13 y 14% de share habitualmente y se despidió por encima de la barrera del 15%. En cambio, 'TardeAR' ha sido incapaz de superar el 11% de cuota. Tan sólo lo logró el lunes por el factor estreno, pero desde entonces ha ido perdiendo seguimiento día a día hasta cerrar la semana con un desalentador 10% y apenas 800 mil espectadores.
Un fracaso absoluto asumido por la propia Ana Rosa, que en una entrevista reciente a El Televisero afirmaba que no liderar por encima de Sonsoles Ónega, su principal rival, sería considerado como tal. Y lo cierto es que la presentadora de Antena 3 le ha ganado con creces y de forma indiscutible en esta primera semana (a la izquierda 'TardeAR'y a la derecha 'Y ahora Sonsoles'):
Lunes: 11.3% y 11.1%
Martes: 10.4% y 12%
Miércoles: 10.4% y 11.9%
Jueves: 10.4% y 12.6%
Viernes: 10% y 12.5%
Además, el magacin de Telecinco no ha sido segunda opción tampoco, situándose también por detrás de La 1 de TVE en gran parte de su tramo horario debido a la doble entrega que se ha ofrecido de la serie 'La Promesa', que ha batido récords de audiencia precisamente esta semana.
Y esto no es todo, porque al desaguisado que se perfila en las tardes hay que sumar un daño colateral: el fiasco en las mañanas. La eliminación de la marca 'El programa de AR' ha debilitado preocupantemente la única franja que controlaba Telecinco hasta la fecha. En consecuencia, los nuevos magacines matinales han cedido frente a sus competidores. 'La mirada crítica' y 'Vamos a ver', ambos formatos de la productora presidida por Ana Rosa, han caído, entregando la corona a Susanna Griso y 'Espejo Público'.
Sigue toda la información de El Televisero desde Facebook, X o Instagram