‘Sálvame’ denuncia una estafa que salpica a Kiko Matamoros y el colaborador anuncia medidas legales

Miguel Frigenti descubre el engaño al que ha sido sometido su compañero de ‘Sálvame’

Miguel Frigenti ha destapado en ‘Sálvame‘ la estafa de la que ha sido víctima Kiko Matamoros. El programa arrancó su emisión del lunes anunciando que tenía una importante información sobre uno de los colaboradores presentes en el plató. Al final de la tarde fue el propio Frigenti quien explicó que se trataba de Kiko Matamoros. No es una noticia fácil para el colaborador, dado que es una noticia que tiene una estricta relación con su cuerpo y su relación con Marta López.

Nada más conocer que la información correspondía a él, el colaborador se disponía a abandonar el plató pero era su compañera Belén Esteban quien le presionaba para que se quedara. Finalmente, Frigenti anunció que había descubierto que Matamoros y su pareja habían sido víctimas de una estafa. Para explicarlo, el colaborador se remontó a las palabras de su compañero de hace unas semanas en las que contó que tiene tatuadas en la piel las coordenadas del bar en el que conoció a su novia Marta.

«Cuando veo las coordenadas yo me mosqueo porque él dice que pertenecen a la ubicación de ‘Oh my club’. Si que es verdad que la primera fila no me extraña, porque tenemos hemisferio norte y hemisferio sur y España esta en el norte, pero en la fila de abajo pone E de este y España está en el Oeste. Entonces, no puede ser que la Comunidad de Madrid ponga Este. Entonces, hablé con varios expertos y me dijeron que esas coordenadas no son las de ‘Oh my club», empezó explicando el colaborador sobre el tatuaje de su compañero.

Kiko Matamoros en ‘Sálvame’ tras conocer la estafa: «Voy a hablar con mis abogados»

Tras esto, el joven se puso a investigar sobre a qué corresponden las imágenes: «Entonces, me pongo a investigar a qué sitio pertenecen estas coordenadas. Y estas coordenadas que llevan Kiko y Marta tatuadas en el brazo. Estas coordenadas me llevan a la Yverdon-les-brais, en Suiza. Que es una ciudad…». En ese mismo instante, Kiko Matamoros reaccionaba: «Voy a hablar con mis abogados. No, no, yo me voy a hablar con mis abogados porque le di al tatuador la dirección y le dije que me las buscase. Y me las busca y… A mí ya me da igual todo ¡Qué hago! ¿Me corto el brazo?». E insistía: «No me lo puedo creer, me voy a tener que cortar el brazo».

Pero Miguel Frigenti seguía insistiendo en su investigación: «Me he puesto a investigar Yverdon-les-brais y es una ciudad muy famosa por sus club de intercambio de parejas». Y enseñaba las imágenes a las que corresponden las coordenadas del tatuaje del colaborador: «Esta es la coordenada exacta de lo que tiene tatuado Matamoros. Es decir, conociste a Marta en un seto de un pueblo perdido de Suiza».

«Afortunadamente, las coordenadas de Marta son muy pequeñas y se las podrá modificar sin mayor problema», reflexionaba entonces Kiko Matamoros en ‘Sálvame’. Y se lamentaba por la situación en la que se está viendo: «Le dije: ‘Búscame las coordenadas de esta dirección’. Y no me fui a buscarlo… Estoy jodido, claro que estoy jodido. Ahora mismo, lo único que se me ocurre es hacerme un viaje con Marta a Suiza y me cambiaré el tatuaje, no me lo quitaré… Es una putada. Lo siento por ella, a mí me da igual. El tatuador era amigo mío».