El futbolista ha mostrado su preocupación por el incendio en el pueblo de sus abuelos, Navalacruz en Ávila.
No está siendo el mejor verano para la pareja que forman Iker Casillas y Sara Carbonero. Primero fue el infarto que sufrió el futbolista en el mes de mayo; luego cuando a la periodista le detectaron cáncer de ovario. Y ahora el portero se ha llevado un gran susto por el incendio que está asolando en las últimas horas a su pueblo, Navalacruz (Ávila).
"Imagen que no gusta ver. Algo malo está pasando cerca", escribía Iker en su cuenta de Instagram junto a una fotografía de un helicóptero agua de la piscina natural de esta localidad abulense.
El incendio de Navalacruz se produjo este martes en torno a las 13.15 horas y las fuertes ráfagas de viento hicieron que las labores de extinción se complicaran e incluso que las llamas avanzaran. Gracias a las labores de Unidad Militar de Emergencias (UME) y los miembros de la BRIF de La Iglesuela y la BRIF Puerto el Pico, se ha contenido el frente que avanzaba hacia el municipio, aunque se sigue manteniendo el Nivel 1.
Tras la foto que subió a Instagram, Iker Casillas también ha compartido en Twitter el tweet publicado por la Asociación de Trabajadores de las BRIF (ATBRIF), perteneciente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en el que se ve un vídeo del incendio.
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