Catalina vuelve a 'La Promesa' y abandona por el momento su autoexilio en el hangar para ayudar a su prima Martina, sospechosa del envenenamiento de Ayala. Sin embargo, este regreso a palacio levanta grandes ampollas. Cruz y Catalina tienen un brutal enfrentamiento cuando la marquesa le intercepta y le pide explicaciones sobre su retorno, hasta el punto que Alonso se ve obligado a intervenir para imponer algo de cordura.
Petra se muestra con el carácter cada vez más agriado. Y aprovecha el regreso de Lope a cocinas tras su convalecencia para arremeter contra él con dureza. Es más, amenaza con remover Roma con Santiago para despedir al cocinero si vuelve a las andadas. El cocinero, a pesar de tener saldadas las deudas gracias a Rómulo, continúa muy descentrado.
Por su lado, el conde de Ayala, cuya salud aún parece renqueante, sigue empeñado en que Martina está detrás del intento de envenenamiento y no se va a quedar de brazos cruzados por mucho que el marqués le haga entrar en razón. El conde toma una decisión muy dura para el futuro de Martina en La Promesa. ¿Será capaz de dar parte a las autoridades?
Mientras, Santos, que sigue acogotando a Vera, propone un desconcertante plan de parejas a María Fernández y Salvador. ¿Con qué intenciones? El lacayo obliga a sus compañeros para que les acompañen a la verbena del pueblo. Así, tendrá más posibilidades de que Vera le acepte ese plan. Mientras, Candela inicia las gestiones para que le devuelvan el hijo a Virtudes, aunque no será buena idea llevarlo a La Promesa si finalmente lo consigue.
Petra no deja ni a sol ni sombra a Jana por sus misteriosas salidas nocturnas y su comportamiento extraño. Y se produce un fuerte enfrentamiento entre ellas en el que Ricardo Pellicer se ve obligado a mediar. Finalmente, tanta vigilancia de la ama de llaves hacia la criada da sus frutos y le pilla en cocinas preparando un hatillo de comida para llevarla a Pía en la cueva en la que permanece escondida mientras todos los demás creen que está muerta.
Avance de 'La Promesa' capítulo 384 del martes 25 de junio
Alonso sigue evitando a María Antonia de todos modos, mientras Cruz le cuenta a su amiga que no puede soportar la presencia de Catalina. La muchacha ha vuelto para intentar ayudar a su prima investigando lo que pasó antes de que se encontrara el veneno en su habitación, pero no parece dar con nada hasta que le dicen que hable con Petra. Ella podría tener respuestas.
En paralelo, Lope le pide disculpas a Vera por su frialdad y ella sigue recibiendo presiones de Santos para que se comporte con una novia normal. Por su parte, Virtudes se marcha en busca de su hijo y Petra, que siente que todo el mundo le oculta cosas, se enfrentará fuertemente con Rómulo. Jana va a visitar a Pía nuevamente al escondrijo en el que se encuentra oculta, pero su estado es cada vez es más crítico.
Mientras tanto, todos en La Promesa presionan al conde de Ayala para que no denuncie a Martina ante la Guardia Civil como así tiene previsto, y este toma una determinación completamente sorprendente. Será un ultimátum que provocará un cisma en los Luján, pues si Martina quiere librar la cárcel, tendrá que aceptar su ingreso en un manicomio. El futuro de la joven es perturbador.
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