La ficción coreana sigue en lo más alto de las plataformas. Netflix no deja de apostar por la ficción del país asiático, y con razón, porque cada nueva serie que lanza, no deja de encaramarse a los primeros puestos del ranking de lo más visto. Ahí tenemos, por ejemplo, a 'La paradoja del asesino', uno de los últimos éxitos de Netflix Corea, con uno de los protagonistas de la ganadora del Oscar 'Parásitos'. Y ahora parece que le toca el turno a una nueva ficción de terror y misterio que, curiosamente, casi comparte título. Estamos hablando de 'Parasyte: Los grises', que llegó en forma de serie limitada el pasado 5 de abril y que está colocándose en los top 10 de lo más visto.
En solo dos semanas, 'Parasyte: Los grises' se ha convertido en la serie más vista de habla no inglesa a nivel internacional en Netflix. Pero lo impresionante de esto, es que sus números superan a todo lo demás. Es decir, sus horas vistas y sus visualizaciones acumuladas son más altas que el top 1 de 'series de habla inglesa', 'películas de hablar inglesa' y 'películas de habla no inglesa'. Increíble pero cierto. Además de colarse en el top 10 de multitud de países:
- 49,000,000 horas vistas (10.000.000 más que 'El problema de los 3 cuerpos')
- 9,800,000 visualizaciones (doblando a la segunda en el ranking)
- Número 1 en 34 países
- Top 10 en 84 países
¿De qué va 'Parasyte: Los grises'?
Cuando unos parásitos desconocidos se apoderan de huéspedes humanos y van ganando poder, la humanidad debe levantarse para enfrentar esta creciente amenaza.
'Parasyte: los grises' no es apta para los delicados de estómago. Con toques de 'La invasión de los ladrones de cuerpos' o similares, hay momentos muy turbios, sobre todo cuando estos parásitos atacan a otros huéspedes para usarles como receptores. Lo cierto es que la serie de Netflix no es original. Es una libre adaptación (porque cambia bastantes cosas) inspirada en el 'Parasyte', creado por Hitoshi Iwaaki, y que vendió más de 25 millones de copias en más de 30 regiones y países. Y tampoco es la primera adaptación, ya que en Japón hay tanto serie de anime como dos películas.
De hecho, el propio Iwaaki habló sobre esta adaptación en TUDUM recientemente, y se mostró muy entusiasmado. “Muy emocionado de que esta sea ‘una nueva historia’. Si bien soy el autor del manga original, también podría ser un miembro de la audiencia que experimenta emoción y asombro", explicó Iwaaki.
"Pensando en cuando el manga original fue adaptado en Japón, ‘Parasyte’, el manga, es como un ‘niño’ para mí, nacido de mi propio trabajo en una habitación pequeña, mientras que la película de animación y acción en vivo fueron como ‘nietos’, nacidos desde que mi hijo salió al mundo y conoció a muchas personas y su sabiduría, experiencia y tecnología. Estoy muy feliz de que otro ‘nieto’ esté naciendo en Corea (con Netflix). Creo que esta ‘nueva historia’ que se desarrolla en un lugar diferente nos llevará a un mundo más allá de mi imaginación”.
Un director a la altura
Se nota que 'Parasyte: los grises' está escrita por Yeon Sang-ho. Si os suena de algo su nombre, es por ser el director de la magnífica 'Train to Busan', que supuso una reinvención del género de zombis. Aquí Netflix ha apostado por un realizador con una trayectoria muy reconocida en este tipo de thrillers trepidantes (porque si algo tienen en común 'Parasyte' y 'Train to Busan' es precisamente eso), y le deja dirigir varios de los episodios.
La serie comienza con imágenes de cómo estamos destrozando el planeta poco a poco, y que precisamente ese es el caldo de cultivo perfecto para que una entidad alienígena venga a la Tierra y comience a sembrar el caos. Porque lo siembra, y mucho. Solo hay que ver la escena en el concierto de electrónica, donde un pequeño bicho con punta de aguja acaba por meterse en el cuerpo de un borracho y asesinando a todo el que se cruza en su paso.
La serie de Netflix tampoco va a ser así durante todos sus episodios. Porque hay cierta tendencia a la conspiración y a la paranoia, nunca sabiendo si la persona que tienes enfrente está infectada o no. Pero Yeon Sang-ho sabe llevarlo muy bien, con momentos que te cortan la respiración, aunque algunos otros demasiado absurdos como para tomárselos en serio. Aunque eso es precisamente el mejor homenaje al manga. Ya que los acostumbrados a las historias de animación japonesa saben que tanto el anime como el manga siempre se mueven en un equilibrio entre ambos estados.
Además, 'Parasyte' tiene a su favor la corta duración para un producto de este tipo (solo seis episodios), y además acaba con un buen cliffhanger para la hipotética segunda temporada. Ya solo visto el éxito en Netflix, es bastante probable que tengamos noticias muy pronto sobre una más que merecida renovación.
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