'Rocío, contar la verdad para seguir viva' ha emitido los audios de las declaraciones de la protagonista en sede judicial por su denuncia por lesiones psicológicas
Rocío Carrasco ha vuelto a desgarrar a la audiencia de 'Rocío, contar la verdad para seguir viva'. En la undécima entrega de la docuserie, la protagonista se ha centrado en toda la batalla judicial en la que se encuentra con su exmarido. En concreto, ha dejado muy claro que Antonio David jamás ha sido absuelto de malos tratos porque de momento no ha sido juzgado por ello. Además, se ha pronunciado por la posible declaración de su hijo en la última demanda que le ha interpuesto su exmarido.
Por otro lado, la serie documental se ha centrado en la denuncia por lesiones psicológicas que presentó Carrasco. Es más, el programa ha emitido la declaración de la protagonista sobre cómo le ha afectado el escarnio constante de Flores. "¿Cuál es el hecho, el detonante que ha dado lugar a que usted interponga una denuncia? ¿Qué es lo último que ha pasado para decir 'no aguanto más, interpongo una denuncia'?", le pregunta el juez, a lo que ella se muestra contundente: "El hecho es llevar diecisiete años soportando el que una persona difame... El que una persona me arrebate lo más grande que puede tener una madre que son sus hijos".
En su declaración, insiste lo duro que ha sido para ella "tener que escuchar todo tipo de barbaridades". "Ha hablado de infidelidades, de mala madre, de que he abandonado a mis hijos, de que no los he cuidado, de que no me he preocupado... Ya mis hijos no están". Ya entre lágrimas, Rocío Carrasco se rompe ante el juez: "Veo que no cesa, que esto no cesa, que yo ya lo he hecho todo. Lo he hecho todo para procurar que este hecho cesara. Y no ha terminado. No termina, va a más. Esto no tiene final. Y yo no puedo más".
Rocío Carrasco sobre Antonio David: "Que me desmerece como mujer, como persona, que me coarta, que me mutila"
"Usted alega que está en tratamiento. ¿Desde cuándo?", le preguntaba entonces el juez. Por su lado, Carrasco le explicaba el temor que sentía de que su situación personal se utilizara en su contra judicialmente: "Desde hace seis años. Yo no he querido nunca acudir a un psiquiatra ni a un médico precisamente porque estaban en proceso todos estos procedimientos para quitarme la custodia de mis hijos. Y yo no quería por nada del mundo que este señor pudiera agarrarse a que yo no estaba bien psicológicamente. No quería darle un arma para que la usara mediáticamente y judicialmente".
Y, con falta de aire y entre lágrimas, explica todo lo que ha tenido que vivir: "Cuento al psiquiatra, que aparte de tenerme así durante 17 años, ha puesto a mis hijos en mi contra. Ha llevado a mi hija a que me pegue una paliza. No me deja vivir. No consiente que viva. Cada vez que este señor sale en una portada de revista diciendo lo que dice, yo me tengo que ir corriendo al psiquiatra porque me tiene que subir la medicación. No duermo ni con pastillas. Este señor ha hecho que mis hijos me odien".
Y Rocío Carrasco insiste en todo lo que le ha perjudicado Antonio David Flores: "Me ha privado del amor, del cariño, del respeto, de la confianza de mis hijos. Lo ha hecho privada y públicamente. A mi me da vergüenza salir a la calle. Que me desmerece como mujer, como persona, que me coarta, que me mutila, que yo tengo un trabajo que tiene que estar de cara al público. Yo no he podido trabajar en muchísimas ocasiones porque no me atrevo".
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