María Teresa Campos, al límite toma una desesperada decisión por dinero

María Teresa Campos estaría ahogada por las deudas y se vería obligada a dejar su casa, que pone en venta a la baja.

No corren buenos tiempo para el clan Campos, que en los últimos meses atraviesa uno de sus momentos más complicados. Tanto madre, María Teresa, como hijas se han visto y se están viendo en situaciones de apuros. Por un lado, Carmen Borrego, al límite en su trabajo, decidió abandonar ‘Sálvame’, pues no se sentía arropada por sus compañeros. Más tarde era Terelu Campos, aunque esta ha encontrado un refugio en ‘Viva La Vida’.

Y por si no fuera suficiente, a la matriarca tampoco le ha sonreído la suerte. La comunicadora ha tenido que hacer frente este verano a todo tipo de rumorologías acerca de la relación con Edmundo Arrocet. Su viaje a Chile por motivos personales le puso en el disparadero y unas supuestas fotografías en las que el humorista aparece con otra chica hicieron saltar las alarmas. Sin embargo, todo quedó en especulaciones.

No obstante, esto sería pecata minuta para otro de los grandes frentes que lleva encarando María Teresa Campos. No es otro que el de su compleja situación económica. Según siempre la revista ‘Lecturas’, la presentadora estaría pasando por un momento muy complicado. Tanto es así, que habría decidido tomar cartas en el asunto inmediatamente, empezando por bajar el precio de la casa que tiene en venta desde hace cuatro años en Las Rozas.

En este sentido, su obsesión es deshacerse de ella. Una mansión que implica un gasto en mantenimiento de unos 8.000 euros mensuales. Por ella pedía 4,3 millones de euros. «Teresa está dispuesta a negociar a la baja si alguien le hace una oferta en firme«, revelaba la revista. Sin embargo, no sería la única decisión drástica y dolorosa que ha tenido que tomar, pues hay más.

Y es que, hace unos meses, la televisiva puso en subasta algunos enseres de la casa. Se trataría de prácticamente todos los muebles de la casa a excepción de los que hay en la zona habitada por ella. Las otras estancias de la mansión, donde estaban su hijas y nietos, han quedado vacías. «María Teresa se ha visto obligada a volver a vender pertenencias y a reducir gastos hasta hoy imprescindibles para ella«, aseguraba la publicación.