Siempre hay bulos pero sin duda la DANA ha multiplicado por mil las falsas noticias relacionadas con la tragedia. Más allá de la polémica en torno a lo de los cadáveres del parking de Bonaire que ha afectado de lleno a Iker Jiménez; en los últimos días se ha producido también una campaña de odio y de desinformación en contra de Cruz Roja. Y en medio de estas acusaciones, Karlos Arguiñano ha querido enviar todo su apoyo a esta organización desde su programa en Antena 3.
Así, desde que se produjo la tragedia de la DANA se han producido diferentes campañas en contra de las ONG que se han desplazado a las zonas afectadas por la dana. Así, grupos de ultraderecha y algunos influencers no han dudado en acusar a organizaciones como Cáritas o Cruz Roja de hacer negocio con la ayuda a las víctimas e incluso negando que estén ayudando sobre el terreno.
"Ayudan a los inmigrantes de Canarias y no pisan Valencia", aseguraban algunos grupos de ultraderecha en redes sociales en alusión a Cruz Roja o Cáritas acusándoles de ser las primeras en ayudar a los miles de inmigrantes que llegan a nuestras costas tratando de encontrar una mejor vida y de no estar en Valencia.
El mensaje de Karlos Arguiñano a la Cruz Roja en Antena 3
Y coincidiendo con estas injustas acusaciones, Karlos Arguiñano se ha acordado este martes en 'Cocina abierta', su programa de televisión de Cruz Roja y no ha dudado en enviarles un cariñoso mensaje en directo. Lo hacía después de contar una anécdota de uno de sus yernos que trabajan en dicha organización.
"Tengo un yerno que trabaja en la Cruz Roja, estaba en un pueblo y a las 3:30-4 de la mañana les llaman a la puerta y estaban dormidos los que estaban de guardia, y una señora que venía con tres paraguas y le dijeron qué pasa. Y decía ella 'quiero un taxi'. Y le preguntan para qué quería el taxi y les dice que para ir a la casa de mi padre. Y le preguntan '¿qué años tiene su padre? 50. ¿Y usted? Yo 73. Y ven que tienen un problema con la señora", relataba Arguiñano.
"Me parece curioso, con 73 años, tres paraguas llamando a la puerta de la Cruz Roja que quiere un taxi para ir a casa de su padre. Vivía sola la señora, es curioso cuando se nos va un poco la cabeza pues para eso están los de la Cruz Roja y otra mucha gente para echar una mano a toda esta gente que vive un poco desorientada. Un hurra por los que trabajan en la Cruz Roja y en todos estos estamentos para ayudar a la gente", concluía Karlos Arguiñano.
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