Sonsoles Ónega se ha convertido en la 'reina de las tardes'. 'Y ahora Sonsoles' lidera cada día la franja vespertina frente al 'TardeAR' de Ana Rosa Quintana en Telecinco y 'La Plaza' de Jordi González en TVE. Sin embargo, la presentadora tiene una serie de manías que ahora han salido a la luz.
Si algo caracteriza a Sonsoles Ónega es el hecho de no tener pelos en la lengua a la hora de decir lo que piensa o dar su opinión sobre polémicos temas. Es esa personalidad lo que atrae a los espectadores que cada tarde conectan con el programa de Antena 3. Pero también tiene numerosas peculiaridades, supersticiones y manías que afectan a todos sus compañeros de programa.
Por ejemplo, el amarillo, los gatos o las escaleras son elementos que no pueden estar en su plató. Tal y como ella confesó en 'El Hormiguero', en ocasiones hace el pino por las instalaciones de Antena 3 para limpiar sus malas energías o por algún augurio sobre la audiencia.
La obsesión de Sonsoles Ónega con la temperatura del plató
Otra de las manías de Sonsoles Ónega es su obsesión por la temperatura del plató. La periodista pide que pongan la calefacción bien alta, aunque llegue a molestar a sus compañeros por el calor que hace en el estudio. De hecho, el programa vespertino compartió un vídeo con varios de los colaboradores de 'Y ahora Sonsoles' explicando lo que supone para ellos esta obsesión de la presentadora.
La comunicadora comparte esta manía con uno de sus rivales en las tardes, Jordi González. El catalán también pide una temperatura concreta en el plató, aunque en este caso es al revés. Él prefiere que en el estudio haga frío haciendo que muchos de sus compañeros tengan que abrigarse.
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