'Así es la vida', está, a menudo, lleno de momentos de pullas y bromas entre sus colaboradores. Este miércoles, el programa presentado por Sandra Barneda y César Muñoz se cobraba otra víctima. Esta vez ha sido el turno de José Antonio Avilés. El colaborador se disponía a terminar una explicación sobre Isabel Pantoja cuando los presentadores han comenzado a burlarse de él.
Sandra Barneda y César Muñoz abordaban este miércoles en 'Así es la vida' todos los detalles de la venta del piso de Isabel Pantoja en Fuengirola. Ha sido entonces cuando, José Antonio Avilés ha aprovechado para aclarar todas las dudas sobre el asunto. El colaborador ha ofrecido un elaborado discurso lleno de detalles en el que no dejaba al resto de sus compañeros participar.
La presentadora de 'Así es la vida' bromeó sobre el colaborador antes de dar paso a José Antonio Avilés, que se encontraba fuera de plató. “Avilés ha podido beber agua, tomar aliento, oxígeno, y tiene unas anotaciones sobre el piso de Fuengirola”, apuntó la presentadora. "Hay información que se ha dado que no es del todo correcto, y nosotros esta tarde, yo, en exclusiva, os voy a contar lo que ha sucedido”, adelantó el colaborador.
'Así es la vida' se mofa de Avilés
El tertuliano aclaró el estado de venta del famoso ático de Isabel Pantoja en Fuengirola y la serie de acciones que llevó a cabo hace poco con un abogado, recordando el juicio al que se enfrentó hace unos años en Málaga por alzamiento de bienes. Durante más de dos minutos y medio sin interrupción, el colaborador de 'Así es la vida' contó a sus compañeros todos los detalles que manejaba sobre el caso.
La intensidad de José Antonio Avilés iba variando según avanzaba en su discurso, y esto despertó la risa en alguno de sus compañeros. César Muñoz bromeó al final de su intervención por las "pausas dramáticas" que había hecho el colaborador. A las burlas se unió más tarde Sandra Barneda, que pidió por favor que cuando acabase alguien de plató le hiciese un resumen.
La presentadora de 'Así es la vida' bromeó de esta forma con que, al igual que los presentes el plató, el público se encontraría muy perdido tras el extenso discurso de Avilés sin interrupción ni intervenciones. Uno de los datos más chocantes que Avilés reveló sobre la sonada venta del inmueble es que la tonadillera se habría llevado incluso las puertas antes de venderlo.
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