Rosa López se ha roto con Jordi Évole al hablar del duro precio de la fama y las consecuencias que ha pagado tras el boom de 'OT 1'.
La cantante Rosa López se ha abierto en canal este domingo con Jordi Évole en 'Lo de Évole' al hacer balance de su trayectoria en el mundo de la música y hablar como nunca del alto precio que pagó por su brutal ascenso a la fama.
Y es que sin duda, convertirse en la ganadora de la primera edición de 'Operación Triunfo' le cambió la vida pero también le dejó unas secuelas que todavía colean. Y es que como asegura, fueron muchos los que quisieron sacar "tajada" de su victoria y echando la vista atrás confiesa que le hubiera gustado sentir "más empatía" por parte de muchos.
Rosa no ha podido contener las lágrimas al recordar lo mucho que sufrieron sus padres al despedirse de ella antes de entrar a la academia de 'OT'. "Eso fue brutal. Dentro de mí, algo se me arrancaba del alma. En el aeropuerto notaba la cara de terror de mis padres. Fue horrible, bonito, pero horrible", decía sin contener las lágrimas.
'Lo de Évole' ha recordado algunas de las preguntas más incómodas y completamente fuera de lugar a las que tuvo que hacer frente Rosa durante las galas de 'OT'. Preguntas como "¿Cómo llevas el régimen, mujer?", "¿cuántos kilos has perdido ya?". Sin duda cosas que no deberían haberse permitido y menos en la televisión pública.
Rosa ha relatado algo que quizás muy pocos saben y es que tras acabar 'OT' siguió viviendo en la academia hasta que participó en Eurovisión. "Estuve viviendo en la academia seis meses. Las cámaras estaban ya apagadas, pero estuve allí hasta que se celebró Eurovisión", relata. ¿El motivo? "Salir a la calle era muy peligroso para todos", asevera.
Sobre lo que supuso la experiencia de Eurovisión para ella, Rosa ha recordado lo mal que lo pasó pues todo el mundo le hacía sentir que había fracasado por quedar en séptimo lugar. "Estuve dos años y medio escuchando 'vaya, un séptimo lugar', 'vaya mierda de puesto", le cuenta a Évole. "La presión es bonita, absurda, ridícula pero preciosa", añade.
"Todo el mundo quiso sacar tajada"
Pese a que Rosa se convirtió en toda una estrella y todo el mundo la llamaba Rosa de España, la realidad es bien distinta. Y es que pese a ser la primera ganadora de la historia de 'OT' y haber quedado en séptimo lugar en Eurovisión, su carrera se estancó.
Y es que todo fue muy rápido, de hecho recuerda que su primer álbum lo grabó y casi no se sabía ni las canciones. En aquella época sonaba en todas las radios y se vendía todo tipo de merchandising con su cara y nombre. Sin embargo, todo lo que sube baja y Rosa empezó a ver cómo todo el mundo se olvidaba de ella. "Mi música dejó de sonar en la radio en 2004", cuenta la granadina dejando claro que no lo entendía.
"Este es el mejor ejemplo de que las cosas se ganan. El día que suene en cualquier radio será como 'lo he conseguido'. Sería una satisfacción para mí, para mis seguidores, para mi familia, para mi padre", dice muy emocionada.
Ha sido al hablar de su trayectoria musical cuando Évole le preguntaba si en algún momento llegó a pensar en tirar la toalla. "Me hubiera gustado sentir más empatía. Yo puedo empatizar con el camarero, con cualquier trabajador. Pero, ¿por qué nadie empatiza conmigo? Todo el mundo quiere llevarse tajada de mí. Pero es imposible que tire la toalla porque no soy feliz si no me dedico a esto", dice con contundencia.
Los problemas económicos y sus deudas con Hacienda
Si hay un tema del que se ha hablado mucho es de cuánto ganaron los concursantes de 'OT 1'. Ha sido al hablar de ello cuando Rosa ha contado con claridad los problemas económicos que tuvo por una deuda con Hacienda. "Mi hermano sabía todo y mi padre estaba gestionándolo como podía. Teníamos un gestor al que un día le pregunté y por preguntar, que ninguno sabíamos nada, el mismo gestor me dijo que había un problema con Hacienda de que no había justificado 80 millones de pesetas", le explicaba a Évole.
Y al enterarse, Rosa López no lo dudó. "Vendí mi casa, vendí la casa que compramos en Monachil (Granada) y me compré un piso de 80 metros cuadrados en Madrid. No tengo terraza", terminaba diciendo.
Por último, ha explicado cuál es su situación actual al revelar que "no estoy ligada a ninguna discográfica, ahora soy buena, bonita y barata". Y a la pregunta de cuál es su caché, no ha tenido reparos en decir que "Entre 9.000 y 14.000 euros"
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