Rocío Carrasco desmonta punto por punto la imagen de Rocío Flores: «No hay un ápice de verdad»

La protagonista de la docuserie de Telecinco ha valorado las últimas declaraciones de Rocío Flores en programas de televisión

Rocío Carrasco ha hecho frente en el último episodio de ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva‘ la etapa en la que su hija Rocío Flores participó en ‘Supervivientes’. En esa línea, la protagonista de la docuserie de Telecinco ha confesado el motivo de peso que la llevó a no coger el teléfono a su hija cuando le llamó al salir del reality. Explica que esa ha sido la única llamada que ha recibido en ocho años: «Solo me ha llamado una vez».

La hija de Rocío Jurado dice no creerse las palabras de su hija en ‘Supervivientes’. Cuenta que su hija siempre tuvo la oportunidad de hablar con ella e incluso de felicitarle el cumpleaños como lo hizo desde la isla: «Tuvo 8 años para hacerlo pero nunca lo hizo. Si hubiese querido hacerlo en privado lo hubiera hecho, pero nunca lo hizo». Tras ver las imágenes de su hija llorando, cuenta que nunca llegó a verlas por el dolor que le ocasionan pero que sí que se lo habían contado.

En otras imágenes de Rocío Flores que ha tenido que ver Rocío Carrasco se la ve pedir un acercamiento entre ambas, pero especifica que no tanto por ella sino por su hermano. A la pregunta de si tiene algo que pedir perdón asegura que no «y ahí me voy a quedar». Es decir, Flores no ve en una paliza a su madre un motivo para pedir perdón. Tras esto, Jorge Javier le proponía mandarle un mensaje a su madre, a lo que ella se quedaba pensativa. «No hay un ápice de verdad en lo que dice. Una persona que siente esa necesidad falsa que quiere mostrar como verdadera, en el momento en que Jorge dice ‘qué le dirías a tu madre’ sabría que decir», valora Carrasco.

Sobre si ella tiene algo que decir a su hija tras esas palabras también se ha mostrado muy clara: «Yo no tengo nada que decirle. No tengo nada que decirle porque eso que están viendo y han visto durante mucho tiempo no es real, no es verdad. Detrás de eso hay unos intereses claros. Esa imagen no es cierta y no es veraz. Detrás de eso hay un porqué y hay una motivación». Aclara que «aquí no existe nada al azar, no existe nada que no está totalmente cuadriculado y en una hoja de ruta. Todo se dice por algo y siempre con un beneficio económico. A parte de beneficio que a él le supone destruirme«.

Por otro lado dice no conocer a la Rocío Flores de ‘Supervivientes’: «Sé como es mi hija y hoy por hoy no la reconozco. No es quien ha salido ahí. Rocío no se ha preocupado de como yo he estado [en referencia a su intento de suicidio]. Yo me he preocupado de mi madre siendo hija. Yo he sabido que mi madre ha estado enferma y yo he estado porque es mi madre. Los hijos también tienen que preocuparse por su madre. ¿Y se va Honduras y me felicita después de 8 años?».

Para acabar, insiste en que llevaba el discurso perfectamente preparado: «Ella sabía perfectamente lo que tenía que decir y hacer. Quiero dejar bien claro que ella antes de ser así ha sido víctima de este ser [Antonio David Flores]. Yo no estoy culpando a mi hija de ser como es. Yo culpabilizo a él, a ese deshecho». Sobre la posibilidad a que haya gente que no entienda la frialdad con la que habla también ha sido clara: «Para mí no es fácil, pero para que una madre hable con frialdad sobre algo de sus hijos, así lo tendré que haber pasado… Es el primer día que me pongo por delante de mis hijos porque ya veo que está todo perdido«.