Ana Obregón se ha mudado de Madrid a Mallorca, su lugar habitual de vacaciones, en el verano más duro de su vida.
Tras organizar el funeral en honor a su hijo, Álex Lequio, el pasado martes en Madrid, Ana Obregón ha puesto tierra de por medio y ha huido a Palma de Mallorca, su lugar habitual de vacaciones, donde tiene una casa a la que acude todos los años. Pero este verano será, sin duda, el más duro de su vida.
El hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio falleció el pasado 13 de mayo en Barcelona, a los 27 años, después de dos de lucha contra el cáncer. Desde entonces, la actriz se encuentra muy arropada por toda su familia, que no la dejan sola en ningún momento.
El funeral por Álex fue el pasado martes en Madrid
Debido a que Alex falleció en pleno estado de alarma, al funeral del joven tan solo pudieron acudir las personas más cercanas. Y en el entierro, solo estuvieron presentes los padres y la novia del empresario. Por ese motivo, la presentadora y actriz quiso rendir un merecido homenaje a su hijo en un funeral celebrado el pasado martes 30 de junio en la Parroquia Nuestra Señora de La Moraleja, muy cerca de su residencia madrileña. En él, todos los amigos y familiares de Álex pudieron despedirse de él como se merecía.
Tras cumplir con este deseo que Ana tenía en mente, pese a lo doloroso que supondría para ella, la actriz huyó a Mallorca, donde se ha despojado del riguroso luto que ha llevado desde el triste fallecimiento de su hijo. Poco a poco, es consciente de que tiene que ir saliendo adelante, aunque con Alex siempre en su corazón.
Mallorca siempre ha sido el destino preferido para la familia Obregón. De hecho, Álex viajaba con frecuencia a la isla con amigos para disfrutar de la playa y el buen tiempo. Por eso, este verano, quizá como homenaje al 'hombre de su vida', Ana ha querido hacer las maletas y trasladarse a este lugar que tanto la recuerda a su hijo.
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